Los 133 cardenales permanecen en aislamiento total. Solo pueden interactuar entre sí en la residencia Santa Marta, donde se hospedan. Este jueves se tienen previstas cuatro rondas de votación en la Capilla Sixtina.
El Vaticano asume los gastos del funeral de los papas y la organización de los cónclaves. Mientras que el Estado italiano se encarga de los costos de la seguridad.