Los contagios por Neisseria gonorrhoeae (la bacteria detrás de la gonorrea) se han incrementado en los últimos años según información proporcionada por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). Según apunta la entidad, entre 2013 y 2017 también han aumentado los casos de sífilis y clamidia, alcanzando 2,29 millones de casos.
En cuanto a la Unión Europea y el Espacio Económico Europeo (UE/EEE) la resistencia de la Neisseria gonorrhoeae al antibiótico azitromicina continúa en niveles altos aunque se mantiene estable, de acuerdo con los resultados del año 2016 del Programa Europeo de Vigilancia Antimicrobiana Gonococo (Euro-GASP), del Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés).
Lea aquí: Las bacterias resistentes, una gran amenaza
De acuerdo con cifras de la CDC en los últimos cuatro años la gonorrea ha aumentado en un 67 % mientras que la sífilis lo ha hecho en un 76 %. La clamidia, por su parte, se ha mantenido relativamente estable. Un trabajo adelantado por el medio de noticias Vice concluye: Estados Unidos redujo el financiamiento federal para enfermedades de transmisión sexual en un 40 por ciento en los últimos cuatro años, tiempo durante el cual las tasas de enfermedades de transmisión sexual (ETS) se dispararon a niveles récord.
“Estamos retrocediendo”, dijo en un comunicado de prensa Jonathan Mermin, director del Centro Nacional para VIH / SIDA, Hepatitis Viral, ETS y Prevención de TB de los CDC . “Es evidente que los sistemas que identifican, tratan y, en última instancia, previenen las ETS están a punto de agotarse”.