El municipio de Medellín empezó a llenar ayer sus vacantes en escuelas y colegios oficiales de un listado de elegibles publicado por la Comisión Nacional del Servicio Civil, que para el caso son en total 1.420.
Sin embargo, las plazas a asignar son, por ahora, 1.131 debido a que sobre tres listados pesan demandas de tutelas y otras acciones legales y aún la CNSC no puede decidir el listado definitivo.
Andrés Restrepo Bernal, profesional de Recursos Humanos de la Secretaría de Educación y uno de los voceros del tema, explicó que “el listado se hace por convocatoria de la Comisión Nacional del Servicio Civil en un concurso de docentes y directivos, que por una convocatoria adquieren un pin, se inscriben y tienen que superar pruebas de aptitudes comportamentales, pruebas psicotécnicas, aptitudes para el empleo y entrevistas”.
De acuerdo con los resultados, la Comisión hace una lista de elegibles y con esa lista, que se entrega por puntaje, se pasa a elegir a los docentes para llenar las respectivas vacantes.
Restrepo Bernal admitió que este proceso estuvo demorado, pues se viene con él desde 2012. Argumentó que dicho retraso se debió a múltiples acciones legales que frenaron la definición de la lista.
“Las demandas tuvieron relación con las pruebas que se hicieron en 2013 por la convocatoria por las aptitudes de los docentes”, detalló.
El proceso lo adelantaron la Universidad de La Sabana (Bogotá) y la Comisión Nacional del Servicio Civil. Aún hay tres listados con demandas, para 297 plazas pendientes.
Docentes felices
Los más felices con este proceso son los docentes, pues son ellos los que venían esperando la oportunidad laboral hace casi tres años.
Por eso ayer llegaron puntuales a la primera cita para la asignación de las plazas, audiencia que se celebró en la Secretaría de Educación sede avenida La Playa, donde acudieron desde las 8:00 a.m. a elegir colegio.
Así lo hizo Angela María Sánchez Toro, docente licenciada en básica primaria, quien también admitió que el proceso estuvo demasiado largo y perjudicó laboralmente a a muchos educadores.
“Nos presentamos en 2013, luego se presentó el examen, los antecedentes, después llevar papelería y por fin hoy (ayer) escogimos, estoy contenta porque quedé ubicada en una institución cerca a mi casa”, comentó. Ella reside en el sector Robledo y quedó en la Institución Educativa Jorge Robledo, sector Miramar.
Corrió casi la misma suerte de la educadora Leidy Johanna Flores, normalista superior de la Universidad de Antioquia con énfasis en inglés, quien se ubicó en el colegio Vida Para Todos, del barrio Caicedo.
“Vivo en Buenos Aires y pues es muy cerca a mi casa, se me facilita el gasto en transporte y podré tener más tiempo con mi familia”, dijo.
El proceso le pareció muy organizado y aclara que la favoreció que estuvo bien ranqueada en la lista de elegibles: “Los que salimos con mejor puntaje nos llaman primero y podemos escoger colegio de una lista más grande”, indicó.
En contrario, el exvicerrector de la Universidad de Antioquia, Martiniano Jaime, opina que es “injusto y discriminatorio con las regiones que se favorezca a la capital del Departamento a la hora de la escogencia del lugar de trabajo de los docentes”. Añade que debe ser al contrario: “tener en cuenta e incentivar la vocación de servicio de muchos maestros provenientes de la provincia, que quieren y conocen, con gran sentido de pertenencia, la potencialidad de sus regiones”.
En total, son 420 plazas para instituciones de primaria y el resto vacantes de los niveles preescolar y secundaria.
“Las vacantes son movibles y se dan porque un docente se jubiló o se retiró; en estos tres años hemos generado las 1.428 que le mencioné”, dijo el vocero Restrepo Bernal.
Hoy, mañana y el jueves se harán nuevas audiencias para acabar de asignar las vacantes.