En las últimas horas las autoridades capturaron a alias el Gordo, quien es señalado de ser, presuntamente, uno de los máximos traficantes de armas para las disidencias del frente 36 de las extintas Farc en Antioquia, según las investigaciones que hasta el momento ha hecho la Fiscalía en articulación con la Policía.
Carlos Izquierdo, director especializado contra las organizaciones criminales de la Fiscalía, explicó que este hombre sería responsable de comprar armas como fusiles y pistolas a integrantes de combos o estructuras armadas organizadas de Medellín y el Valle de Aburrá, al parecer, les pagaba con pasta de coca y otros tipos de estupefacientes y sustancias ilícitas.
Entre los elementos de prueba que han recolectado las autoridades sería posible establecer que dichas sustancias que habrían sido entregadas a los combos de Medellín como pago a cambio de armas luego eran procesadas y vendidas al menudeo, indicaron desde el ente acusador.
Pero el negocio no se terminaba ahí. Al parecer, el ‘Gordo’ entregaba las armas que conseguía directamente a alias Cabuyo, principal cabecilla de las disidencias del frente 36 de las extintas Farc.
Este grupo armado tiene injerencia con su accionar delictivo en los municipios antioqueños de Briceño, Ituango, Yarumal, Angostura, Campamento, Guadalupe, Amalfi y Anorí, recordó también Izquierdo.
“En un procedimiento realizado a finales de 2022, la Fiscalía se incautó de varios celulares que pertenecerían a alias el ‘Gordo’ y ponían en evidencia las maniobras y rutas utilizadas para conseguir el armamento”, se lee en un informe entregado por la Fiscalía sobre este caso.
Según el ente acusador, con dicha información obtenida se hicieron actividades de inteligencia y policía judicial que permitieron ubicar al presunto delincuente y capturarlo en Sabaneta, al sur del área metropolitana.
Posteriormente, una fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales presentó a alias el Gordo ante un juez de control de garantías.
Le imputaron los delitos de concierto para delinquir agravado; financiación al terrorismo; fabricación, tráfico, porte de armas de fuego o municiones de uso personal; y fabricación, tráfico, porte de armas, municiones de uso restringido de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos.
El procesado no aceptó los cargos por los delitos imputados, pero se le impuso una medida de aseguramiento en un centro carcelario mientras continúa la investigación en su contra.