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La escogencia de la mesa directiva del Concejo de Medellín fue turbulenta. Inició con una protesta de unos cuantos ciudadanos que pidieron ingresar y terminó con acusaciones, insultos y manotazos. La pelea más fuerte, quizá, fue entre Dora Saldarriaga y Luis Bernardo Vélez.
La concejala no votó por el candidato de la oposición, Simón Pérez, sino que se postuló y votó por sí misma. Aunque eso no cambió la elección, pues los afines al gobierno ya tenían mayoría, sí desató una ola de críticas y enfrentamientos.
Luego de una discusión fuera de los micrófonos, Luis Bernardo Vélez tomó la palabra y dijo: “Deje de estar alcahueteando a este gobierno. Usted nunca hizo campaña para la presidencia. Hoy la discusión es quién está con el gobierno o contra él”.
Después, Vélez le dijo que se estaba “agazapando” en el discurso feminista para apoyar el gobierno de Daniel Quintero. En la tribuna, una mujer, que apoyaba los postulados del Centro Democrático, le gritó “bandida” a la concejala. Lucas Cañas, el presidente de la corporación, hizo retirar a la mujer.
La concejala, también de manera airada, se defendió diciendo que no tenía cuotas burocráticas en la alcaldía. “Que me muestre cuál contrato tengo yo. Vos, Luis Bernardo, sí podés hablar de burocracia, que comenzaste siendo parte de esta administración”, contestó Saldarriaga, que luego dijo que se declarará de oposición al gobierno, como el estatuto de oposición lo permite.
Sin embargo, el concejal Alfredo Ramos, del Centro Democrático, le dijo que no podía declararse en oposición, pues el estatuto de oposición solo permite un cambio de estado, y ella ya había dado el salto para declararse independiente. “No diga cosas sin fundamento, así como tirándolas por un despeñadero”, le reprendió Ramos.
Otra disputa se dio cuando el concejal Luis Felipe Betancur se postuló para la vicepresidencia primera. El Centro Democrático, amparándose en argumentos jurídicos, dijo que les correspondía ese puesto, por ser la única bancada declara en oposición.
Para el puesto postularon a Leticia Orrego. Sin embargo, la coalición de gobierno tenía un as bajo la manga, proponiendo a Luis Felipe Betancur (Mira y Cambio Radical) para ocupar la vicepresidencia primera. Eso generó más revuelo y de nuevo hubo choques y reproches fuera del micrófono.
El Centro Democrático alegó que jurídicamente esta vicepresidencia les pertenecía. Entonces, para analizar la situación, se pidió un concepto del equipo de abogados de la corporación, que se reunió por siete minutos, mientras se formaron corrillos entre algunos concejales. Los jurídicos concluyeron que se debía votar según las postulaciones que hubiera.
Así las cosas, los 9 que votaron por Simón Pérez votaron por Leticia. Los cercanos al gobierno, de nuevo, se impusieron con 11 votos por Luis Felipe Betancur. De inmediato, la bancada del Centro Democrático abandonó el lugar y dijo que iba a demandar la elección. Dora Saldarriaga volvió a votar por sí misma.
Con la ausencia del Centro Democrático se votó la vicepresidencia segunda, con solo una candidata, Dora Saldarriaga, que ganó como única opción con 12 votos.
La sesión terminó pasadas las dos de la tarde. Las discusiones pasaron a Twitter. Saldarriaga dijo que Vélez y Duque la acusan de no hacer oposición. “Lo que pasa es que ellos quieren la oposición de ellos, la que construye mayorías con la ultraderecha”, dijo.
Sin hacerse esperar, Duque le respondió: “No se trata de lo que yo diga, es lo que ocurrió: la coalición de Quintero te eligió vicepresidenta. Asume las consecuencias de tus actos. Siempre he apoyado con contundencia todas tus iniciativas, curioso que en medio de tu victoria, vengas con señalamientos contra mí”.