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En noviembre de 2006, el papá de Emanuel Torres Mazo se dirigió a la Unidad de Cuidados Intensivos a despedirse de su bebé, que tenía menos de tres meses de nacido. Los médicos le habían dicho a él y a su esposa que ya no quedaba nada qué hacer por el corazón de su hijo y que “se lo entregaran a Dios”.
Claudia Mazo, la madre, recuerda aún las palabras que le dijo a su pequeño:“Fuiste un bebé muy buscado y nos has dado muchas alegrías, pero es hora de que te vayas con Dios a descansar porque estás sufriendo mucho”.
Al día siguiente, el médico les informó que había ocurrido lo imposible: había aparecido un donante, una niña de 14 meses, que había sufrido una miocarditis cuando apenas tenía 39 días de nacida, le devolvería la vida al corazón de su hijo.
Después de la cirugía, el nuevo corazón comenzó a latir poco a poco y, luego de tres años de cuidados y recuperación, le ha permitido al que hoy es un joven de 14 años vivir una vida como la de cualquier otro adolescente. Dice que está agradecido porque “Dios le dio la vida dos veces”.
Fue así como Emanuel se convirtió en la persona más joven en recibir un trasplante de corazón en Colombia, una historia que vale la pena recordar a propósito de la conmemoración de los 35 años del primer trasplante en el país, que lo realizó la Clínica Cardio VID en diciembre de 1985.
Desde esa fecha, la Cardio VID ha realizado 570 trasplantes en personas de todas las edades y 15 de ellos han sido durante la pandemia.
El corazón viajó, con 15 grados de temperatura, desde una clínica a otra y, a las 9:00 a.m. ya estaba en los quirófanos de la Cardiovascular. La cirugía duró casi tres horas y, minutos después, el reubicado corazón comenzó a latir espontáneamente, sin necesidad de estímulos eléctricos.
Antes del procedimiento, Yepes estaba hospitalizado con una angina que no se podía tratar. Estaba incapacitado, sin poder salir de la clínica.
Por eso, cuando los médicos le ofrecieron ser el primer trasplantado, él dijo que correría el riesgo porque ya no podía hacer nada más”.
Así lo recuerda el doctor Alberto Villegas Hernández, médico especializado en cirugía cardiovascular y del tórax que fue el director de la Clínica Cardiovascular Santa María y que fue el cirujano que lideró ese primer procedimiento.
Contó que fue largo y de mucha preparación y se logró con el apoyo del grupo de trasplantes de riñón del Hospital San Vicente de Paúl y uno de inmunología de la Universidad de Antioquia.
Así, el 1 de diciembre de 1985 se convirtió en un día histórico para el país y sentó las bases para más trasplantes que cambiarían la vida de otros pacientes.
Antonio Yepes, con los meses, recobró su calidad de vida a tal punto que retornó a su actividad como obrero y tuvo otro hijo. Vivió dos años más.
Según el doctor Álvaro Quintero, coordinador del Comité de Trasplantes de la Clínica Cardio VID, los pacientes trasplantados tienen una tasa de supervivencia de hasta 90 % en el primer año del procedimiento y 50 % llegan a vivir hasta 13 años o más.
El doctor Juan Camilo Rendón, jefe de cirugía de la Clínica Cardio VID, contó que desde el primer trasplante ha habido cambios logísticos, técnicos y, sobre todo, en el manejo posterior a la cirugía para que el órgano no sea rechazado por el cuerpo.
Agregó que creyeron que durante la pandemia no podrían hacer procedimientos pero que sí es posible con algunas restricciones. Ahora, a los posibles donantes se les debe realizar una prueba covid (cuyo tiempo de espera puede deteriorar los órganos), y cuando hay sospecha de positivo, la persona no puede ser donante.
Según cifras de la Red Nacional de Donación y Trasplante, entre enero y junio de 2019 se realizaron en el país 37 trasplantes de corazón y, entre los mismos periodos en 2020 fueron 33. En cuanto a donaciones de diferentes órganos, hubo 207 en 2019 y 109 van en 2020, mientras que en Antioquia fueron 50 en 2019 y van 29 en 2020.
Hasta el 30 de junio de 2020, en el país se realizaron 11 ofertas de corazón, se registraron 1.061 alertas de pacientes con Glasgow (escala de coma) menor o igual a 5 y se obtuvieron a partir del protocolo de muerte encefálica 109 donantes reales de órganos.
Periodista de la UPB. Amante de las historias y de las culturas. Estoy aprendiendo a escuchar y a escribir.