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Las fuentes de Medellín cargan más que agua
Las fuentes originales de los parques de Berrío y Bolívar terminaron desplazadas y hoy viven realidades dispares.
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La fuente de “La garza” aún funciona en el Hospital San Vicente Fundación. La estructura es utilizada con frecuencia por aves que mitigan el calor con un poco de agua. FOTO JULIO CÉSAR HERRERA -
La fuente de “La garza” aún funciona en el Hospital San Vicente Fundación. La estructura es utilizada con frecuencia por aves que mitigan el calor con un poco de agua. FOTO JULIO CÉSAR HERRERA. -
Fuente actual del parque de Bolívar a la que se le hizo mantenimiento. Según la administración municipal, la estructura está operativa. FOTO EDWIN BUSTAMANTE -
La fuente que estuviera por muchos años en el parque de Berrío hoy está frente a la iglesia de La Veracruz y acusa deterioro por falta de cuidado. FOTO JAIME PÉREZ
03 de febrero de 2020
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Pedro Justo Berrío y su colega el general Simón Bolívar libraron por separado dos sendas batallas en el Centro de Medellín que convirtieron a cada uno en amo y señor de una plaza.
Bueno, en realidad ellos no directamente, pero sí los políticos de la época (finales del siglo XIX y principios del siglo XX) que lideraron contiendas pacíficas para rendir homenaje con esculturas a los dos próceres por encima de las fuentes históricas de agua que adornaban las plazas.
El primero de ellos fue Berrío quien llegó en forma estatua en junio de 1895, 20 años después de su muerte, y obligó a rebautizar la que para ese entonces ya se llamaba Plaza de Zea y que se conoció como la Plaza Mayor de Medellín desde la época del cabildo.
Leonardo Ramírez, politólogo, amante de la historia y creador del portal Génesis de Medellín, cuenta que la llegada de Berrío desplazó a la primera fuente metálica que hubo en la ciudad y que llevaba en el epicentro de la plaza desde 1851.
“Esa fuente que estaba en el parque de Berrío es la que se encuentra hoy frente a la iglesia de La Veracruz (cerca al Museo de Antioquia) y ha tenido un recorrido un poco extraño. Pasó primero a donde ahora queda la plazuela San Ignacio, que en ese entonces era plazuela San Francisco y ahí estuvo por un tiempo indeterminado. De ahí fue llevada al barrio La América y luego la llevaron a la plazuela donde está hoy en un estado de abandono y deterioro”.
De acuerdo con los reportes recolectados por Leonardo, la fuente fue fabricada por la empresa Joseph Winn Fiske e importada desde Estados Unidos. Incluía cuatro grifos con forma de dragones desde los cuales los habitantes sacaban el agua, en tiempos en que las familias más pudientes pagaban por el servicio con monedas de centavo y tenían que llevarla desde las fuentes públicas hasta las casas.
El aterrizaje de La garza
La fuente de “La garza” aún funciona en el Hospital San Vicente Fundación. La estructura es utilizada con frecuencia por aves que mitigan el calor con un poco de agua. FOTO JULIO CÉSAR HERRERA.
Si la fuente metálica que engalanó por muchos años el parque de Berrío cayó en desgracia, la que hizo lo mismo en el parque de Bolívar corrió una suerte bien diferente.
Todo por cuenta de la llegada, en agosto de 1923, del Bolívar Ecuestre, una escultura del italiano Giovanni Anderlini, que 97 años después aún se mantiene indemne y se puede apreciar en el centro del renovado parque.
El desembarco del general montado en el equino obligó a que la fuente fuera trasladada en los años 20 a otro lugar y se escogió el espacio en el que aún se mantiene: la plazoleta central del Hospital San Vicente Fundación, otrora San Vicente de Paúl.
“En 1923, por gestión de don Alejandro Echavarría, el Concejo donó al Hospital la pileta ubicada en el parque de Bolívar, majestuosa escultura en bronce donada a Medellín por don Carlos Coroliano Amador, quien la adquirió en Nueva York a principios del siglo XX”, reseña el San Vicente en el texto conmemorativo del primer centenario.
Álvaro Sierra, exdirector de la Fundación Ferrocarril, destaca el buen estado de conservación en el que se encuentra la fuente del hospital que aún refresca el ambiente del centro médico y que sirve de bebedero a un sinnúmero de aves.
“Al San Vicente hay que felicitarlo por el buen cuidado de la fuente. Hay otras tres fuentes importantes por lo que representan: la de la iglesia San José que fue hecha por el maestro Francisco Antonio Cano, la del cacique Nutibara que es del maestro Pedro Nel Gómez y la de La Bachué que está frente al teatro Pablo Tobón Uribe”, contó Sierra.
Otro referente
En el catálogo de fuentes que son referentes para la ciudad hay otra, más moderna, ubicada al frente del atrio de la Catedral Metropolitana de Medellín. Se estrenó en los años 60 y recientemente estuvo sin operar varios años.
Daniel Madrigal, subdirector de Gestión del Paisaje y Patrimonio de la agencia APP, indicó que como parte de la renovación del parque de Bolívar (inversión de $11.246 millones) desarrollaron una solución temporal con dicha fuente que permitió ponerla en funcionamiento.
Fuente actual del parque de Bolívar a la que se le hizo mantenimiento. Según la administración municipal, la estructura está operativa. FOTO EDWIN BUSTAMANTE
“Junto con EPM le hicimos mantenimiento a la estructura y la pusimos en funcionamiento porque se le habían robado piezas importantes. Sin embargo no tiene el juego de luces como era antes. Hay una idea que está dentro del banco de proyectos de la agencia y es la restauración integral de la fuente que es compleja porque como está ubicada en área de influencia de un bien de interés de carácter nacional como es la catedral”, indicó Madrigal.
Empresas Públicas de Medellín indicó que además de la la del parque de Bolívar responde y hace mantenimiento mensual también por las de La Bachué, parque de Banderas, calle 30, carrera 70, biblioteca EPM, puente de Guayaquil y la fuente La vida que está ubicada en el edificio de EPM.
¿Qué tanto cuentan estos espacios sobre la Medellín de antes? ¿Aportan a la frescura de una ciudad que aumentó 1,7°C de temperatura en medio siglo? Bien lo decía don Tomás Carrasquilla en su texto Medellín: “Donde hay árboles y flores, aves y mariposas, fuentes y perfumes, solo pueden sentirse nobles impresiones”.
La fuente que estuviera por muchos años en el parque de Berrío hoy está frente a la iglesia de La Veracruz y acusa deterioro por falta de cuidado. FOTO JAIME PÉREZ
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