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Quintero canta victoria, pero la revocatoria aún está viva

Registrador dijo que no se votará el 13 de marzo. Está a la espera de certificación del CNE.

  • Alexander Vega, (registrador nacional del Estado Civil) - Daniel Quintero Calle, (alcalde de Medellín) - César Abreo, (magistrado del Consejo Nacional Electoral)
    Alexander Vega, (registrador nacional del Estado Civil) - Daniel Quintero Calle, (alcalde de Medellín) - César Abreo, (magistrado del Consejo Nacional Electoral)

Una cosa está clara hasta hoy en el proceso de revocatoria contra el alcalde Daniel Quintero: la convocatoria para ser votada no será en ninguna fecha coincidente con elecciones de Congreso o presidenciales. Así que la idea de ir a las urnas el mismo día que se eligen senadores y representantes, es decir el 13 de marzo como lo esperaban los promotores de la iniciativa, queda descartada, tal como lo afirmó ayer el registrador nacional Alexander Vega en diálogo con este diario.

Aunque para Quintero “la revocatoria está muerta” y ya no le preocupa, como lo aseguró ayer ante la prensa, el Consejo Nacional Electoral y la misma Registraduría siguen avanzando en las investigaciones para determinar el cumplimiento de los topes de financiación de la recolección de las firmas del comité promotor, por un lado, y por el otro, acatando el fallo de una tutela que ordenó reabrir el estudio técnico de validación de las cédulas.

Esto, en palabras sencillas, significa que para convocar o descartar la revocatoria es necesario que el CNE y la Registraduría certifiquen las cuentas y las firmas, antes de cantar victoria como lo hizo ayer el alcalde. “La revocatoria realmente ya está muerta, ya no es una preocupación para nosotros. Incluso a pesar de que teníamos la oportunidad de volver a revisar las firmas, dado que ya está claro que las cuentas las manejaron mal, no vale la pena gastarse la plata revisando firmas y revisando más cosas”, dijo Quintero a los periodistas.

Ahora bien, ¿qué tan cerca están ambas entidades de llegar a una respuesta que permita que la votación se dé antes de mitad de año?

Para el caso de las firmas, cabe recordar que la Registraduría ya había certificado 132.908 firmas de las 91.211 requeridas para avalar el proceso. Pero una tutela fallada a favor del movimiento Independientes por una jueza en Bogotá, el pasado 20 de enero, obligó a revisar una vez más el estudio técnico de validación de firmas y a entregarles a quienes entablaron la tutela, en cabeza de la contratista Salomé Restrepo Muñoz, los soportes completos del informe técnico de verificación de las firmas y el acceso a la información de la base de datos del Archivo Nacional de Identificación (ANI). Esto último es lo más complejo, a juicio de fuentes consultadas, porque es entregar los datos más sensibles de identidad de quienes firmaron las planillas, en medio de un ambiente de polarización y cuestionamientos a quienes ejercen la oposición valiéndose de una herramienta democrática como la revocatoria.

Cuentas claras vs dilación

En cuanto a la certificación de las cuentas del comité revocador, y del que el alcalde señaló ayer que “hubo triangulación de recursos, que se sobrepasaron los topes” y que hay más información en camino “sobre graves irregularidades en la financiación”, todavía el CNE no ha culminado sus investigaciones. De hecho, hace una semana hubo una audiencia para que las partes presentaran sus descargos. Fuentes consultadas por este diario aseguraron que al interior del tribunal electoral aún hay malestar por la forma en que el magistrado César Abreo suspendió el proceso de certificación sin consultar con sus pares. Incluso, se habló de la posibilidad de relevarlo del caso.

Esas fuentes que conocen muy bien el caso en Bogotá, aseguran que en la revisión que hace el CNE se ha logrado determinar que las cuentas del comité revocador sí están ajustadas a los libros presentados, por lo que en pocas semanas se podría dar un visto bueno. Sin embargo, la estrategia de la Alcaldía consistiría en alargar los tiempos para que la votación sea improcedente. Hay que tener en cuenta que, si no hay una fecha definida de aquí a mitad de año, el proceso se vendría abajo.

En todo caso, si se consigue llevar la ponencia a sala plena del CNE, allí deberá tener 6 de los 9 votos posibles para ser aprobada.

Una vez surta esa votación, y quede en firme la certificación de las cuentas del comité promotor, la Registraduría debe solicitar ante el Ministerio de Hacienda los recursos para proceder a la consulta, trámite que podría llevarse hasta 45 días.

Justamente, ayer el registrador Vega explicó que un proceso similar de revocatoria, como el que avanza en contra del alcalde de Cúcuta que ya tiene ambas certificaciones, el de las firmas y el de las cuentas, sufrió un retraso porque el gobernador fijó la fecha para ir a las urnas sin contar con los tiempos de la Registraduría, que requiere un plazo mínimo para obtener los recursos y preparar la logística de las votaciones.

Frente a la posibilidad de que la votación en Medellín coincida con la elección presidencial, el registrador Vega explicó que desde la doctrina electoral no es posible porque como se trata de un mecanismo de participación, y no una elección ordinaria, aquí la abstención tiene un efecto legal que incide en que se alcance o no el umbral requerido para validar la revocatoria.

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