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En la tarde de ayer el dolor volvió a aflorar en su máxima expresión, cuando por segunda vez esta semana, el pueblo de Salgar se reunió para brindar su último adiós a 17 de sus seres queridos muertos en la tragedia del pasado lunes.
Como la tarde del jueves, cuando fueron despedidas las primeras 33 víctimas, fuertes expresiones de solidaridad caracterizaron a esta comunidad a la que ahora une la tristeza, pero también la esperanza de trabajar unida para superar este difícil momento.
En la misa de despedida, monseñor Roberto López, obispo emérito de Jericó, reconoció el gran acompañamiento de que ha sido objeto la comunidad por parte del Gobierno Nacional, representado por el presidente Juan Manuel Santos, su esposa, María Clemencia y varios de sus ministros; el Gobernador de Antioquia y su equipo, organismos de socorro, las Fuerzas Militares y miles de voluntarios y colombianos, que acudieron en pro de la comunidad.
Las palabras de Monseñor llegaron a lo más profundo de quienes asistieron a la ceremonia. Su mensaje se centró en la importancia de mantener la fe, pese al difícil momento y no dejar perder la esperanza de un futuro mejor para la comunidad que hoy enfrenta esta dura prueba.
El presidente Santos, quien suspendió todas sus actividades la tarde de ayer para estar presente en el sepelio colectivo, ratificó su compromiso con la reconstrucción y la ayuda a los damnificados. Igual que muchos de los presentes dejó escapar sus gestos de dolor y más de una vez bajó la cabeza para orar en silencio por las víctimas y sus deudos, impresionado por las voces desgarradoras de niños, madres, padres y familiares que llamaban a quienes ayer decían adiós por última vez en la tierra.
La vida sigue su curso y los dirigentes, además de ofrecer consuelo, están en el deber de ayudar a los damnificados que, en su mayoría, lo perdieron todo.
Lo bueno es que así lo han hecho desde el primer día y al parecer lo seguirán haciendo durante los próximos 12 meses, según sus compromisos.
“Vamos bien, todo está articulado y los problemas que se van presentando los estamos resolviendo sin contratiempos”, lo reconoció el gobernador de Antioquia, Sergio Fajardo Valderrama, quien anunció que el jueves 28 de mayo se presentará el plan general de intervención de Salgar, la nueva etapa después de dos semanas desde que ocurrió la tragedia.
“Se explicará el plan de acción, el tiempo estipulado, los recursos disponibles y las responsabilidades pertinentes; de manera tal que todo se vaya a hacer y nada pase al olvido. El reto que tenemos es: las viviendas, el desarrollo productivo, la atención a los damnificados, mejorar el estado de las vías, la prestación de los servicios públicos y la ayuda en salud y sicosocial a las personas”, explicó el mandatario de los antioqueños.
El presidente Santos anunció esta semana que el ministro de vivienda, Luis Felipe Henao Cardona, será el gerente que se encargará de la reconstrucción de los sectores afectados en Salgar, tanto en el área rural como en el casco urbano; y que tiene un plazo de un año para mostrar resultados.
El ministro, que ya ha encabezado varias reuniones en Salgar y que ha visitado las zonas que destruyó la creciente de la quebrada La Liboriana el pasado 18 de mayo, entregó personalmente el último reporte de avances.
“Ya tenemos identificados unos lotes para las casas, vamos a hacerle los estudios de riesgo, después vendrá todo el proceso de planeación urbanística y la canalización de colaboraciones, es decir, recibir los recursos de las fundaciones más importantes de Antioquia que quieran hacer su aporte en este proceso”, confirmó el titular de la cartera de vivienda.
Por ahora se habla de 136 casas por construir, pero la cifra podría llegar a 200. El impacto no es solo sobre lo que se dañó, se destruyó o se vio afectado, sino también sobre las familias que siguen viviendo en zonas de alto riesgo.
“El plazo es muy corto, es de 12 meses; sin embargo, los proyectos tienen toda la rigurosidad del caso y sus respectivas etapas: planeación, licencias y construcción. El proceso es integral, que impacte de manera positiva al municipio con otros desarrollos urbanos como centros de desarrollo infantil, educación y unidades deportivas”, aseguró Henao Cardona.
Por ahora el cálculo que realiza el Gobierno Nacional es que la inversión será de 20.000 millones de pesos. Según el reporte oficial, el Censo estará listo en dos semanas. A la fecha, se tienen contabilizadas 461 familias afectadas (más de 1.500 personas).
Por su parte, Beatriz Rave, gerenta de la Empresa de Vivienda de Antioquia (Viva), explicó que su despacho jugará un papel de coordinación y supervisión interinstitucional para facilitar todo el trabajo en el territorio.
“Vamos a realizar los diseños de las viviendas y la etapa de urbanismo. También estamos invitando a las fundaciones del departamento y del país, para que nos acompañen en la ejecución de este proyecto”, afirmó Rave.
Aunque todavía no se ha definido cuál va a ser la forma de operación del convenio, lo más seguro es que el Ministerio de Vivienda le gire los recursos a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres y ella realiza la contratación directa para el proyecto; no habría licitación por ser calamidad pública.
Una vez se terminen todos los censos, que van en un 95 por ciento, a cada familia se le va a abrir una cuenta en el Banco Agrario y se le consignará 250.000 pesos cada mes durante un año. Si la familia ya está viviendo en arrendamiento y no está registrada o todavía no ha abierto la cuenta, igual se le reconoce desde el día uno que tomó el arrendamiento.
El problema es que Salgar no tiene el número de viviendas suficientes para alojar a los damnificados, por eso se conformó una red de municipios amigos: Concordia, Ciudad Bolívar, Jardín, entre otros; para que ayuden con la oferta de vivienda y así las familias puedan pasar estos meses allí, mientras se les construye su hogar.
“Lo que no se quiere, bajo ninguna circunstancia, es que se queden de manera temporal en los albergues, porque eso deteriora la calidad de vida de las familias”, concluyó Henao.
La gerenta de Servicios Públicos de la Secretaría de Infraestructura de la Gobernación de Antioquia, Astrid Barrera, dio un parte de tranquilidad al respecto. Los sistemas de energía y gas del municipio operan en un 100 por ciento en el casco urbano, mientras que en Las Margaritas, hay luz en todas las casas, pero el flujo de gas está suspendido.
“Ya se levantaron todos los postes de energía que afectó la creciente, hay que reconocer el trabajo y la eficiencia de Empresas Públicas de Medellín (EPM). En relación con el servicio de agua potable, tuvimos afectaciones en tres acueductos rurales y el urbano. En el urbano ya arreglamos las afectaciones que sufrió la bocatoma, tenemos algunas conexiones temporales porque varias tuberías iban por la estructura de los puentes que sufrieron afectaciones. El corregimiento Las Margaritas y el caserío La Argelia ya cuentan también con agua potable”, reportó Barrera.
La funcionaria confirmó que su despacho está haciendo presupuestos para hacer reposición de un parte de la red de aducción del alcantarillado porque también quedó afectado. La inversión que se realizará es de 500 millones de pesos para la red urbana y el corregimiento Las Margaritas .
Fotos Juan antonio Sanchez
Periodista de la Universidad de la Sabana. Experto en temas de movilidad, transporte, infraestructura, desarrollo sostenible y gobierno. No hay historia pequeña.