Carteles en el sector salud que han hecho eco en el país como el de los medicamentos, la hemofilia, del VIH o el de enfermedades mentales hacen parte de la principal preocupación y desafío a encarar en el sector.
Así lo plantea la encuesta "Desafíos de la gobernanza en salud en Colombia: Una mirada con actores del sistema de salud", aplicada por el Grupo de Economía de la Salud de la Universidad de Antioquia en septiembre, cuyos resultados se conocieron en diciembre.
La encuesta, realizada a 141 líderes del sector, dejó ver que la principal problemática que se encuentra es la corrupción, con el 72 %, seguido de las falencias en la articulación (41 %) y el desfinanciamiento y la ausencia de los controles y vigilancia del sistema, con 30 % cada una.
Mirada al reto principal
Jorge Humberto Restrepo, director del Grupo de Economía, señala que el resultado refleja, además, que la corrupción no solo está atada a la salud, sino que está en todos los sectores.
"Una parte real, un poco triste, es reconocer ese problema histórico, endémico y estructural", dice Restrepo, al punto de hacer una analogía sobre lo complejo que ha sido enfrentarla: “Casi que es peor que una pandemia, porque seguimos encerrados frente a ese problema”.
José Norman Salazar, presidente del Centro de derecho médico en el Eje Cafetero, plantea, como lo dice Restrepo, que “el otro gran reto después de superar la corrupción será cómo el sistema de salud se acopla para que en realidad sea una respuesta permanente a los problemas ciudadanos", agrega Salazar.
La encuesta no solo se queda en mostrar el problema, sino que traza aspectos que deberían implementarse para luchar contra este flagelo.
Por ejemplo, propone fortalecer las sanciones "penales, sociales y económicas", promover la denuncia ante la justicia, "pues esta predomina en redes sociales y medios de comunicación" y reconocer y enfrentar la "deficiente cultura de prevención y manejo de riesgos" del sistema.
Otros líos
No es el único asunto que preocupa, pues aparecen la desarticulación de los actores del sistema y la desfinanciación, entre otros.
Frente a esto, dice Restrepo, hay que entender que la gobernanza es una forma de gobierno en la que participan diversos actores para tomar decisiones, que está marcada por tres tareas: participación, coordinación y transparencia y rendición de cuentas. "Definitivamente en el sistema de salud nuestro, por sus particularidades, hay muchos actores, entonces a la hora de garantizar el derecho a la salud, se encuentra que no hay articulación", dice el analista, al destacar que, por ejemplo, esto se ha visto en la pandemia, en la medida en que las EPS y las entidades territoriales de salud, no se coordinaron para trabajar y garantizar el acceso.
"Sin embargo, hay buenos ejemplos, como Sura en Medellín, que se articula con las entidades territoriales para el propósito común, y en la pandemia sirvió para aislar casos de covid y rastrear contactos".
Otro aspecto que plantea Augusto Galán, director del observatorio Así vamos en salud, pasa por revisar qué tipo de reformas son necesarias y convenientes, teniendo en cuenta que seguramente en marzo la legislatura iniciará con dos proyectos de ley enfocados en ese sentido; uno apoyado por el Gobierno y otro que impulsó al final de año el partido Alianza Verde.
"A la luz de lo que ha ocurrido con la pandemia, entendiendo que el sistema respondió, también hay que reconocer que debería prepararse mejor para futuras condiciones de riesgo y consolidar el sistema de tal forma que cumpla y satisfaga el derecho a la salud", sostiene Galán.
¿Y para 2021?
Jaime Arias, exministro de Salud, sostiene que los grandes desafíos para el año que empieza se concentran en el aumento de casos de coronavirus que se sentirán en el primer trimestre, que la vacunación sea efectiva y que se haga un manejo siquiátrico de los efectos de la pandemia.
Por último, dice Arias, garantizar la "capacidad de financiamiento durante el año", teniendo en cuenta que aún hay una pandemia, que se deberá apalancar una vacunación masiva y que hay otras enfermedades que siguen generando presión en los servicios de salud.
Frente a esto, Olga Lucía Zuluaga, presidenta de la Asociación Colombiana de Empresas Sociales del Estado y Hospitales Públicos (Acesi), menciona que es necesario retomar una reforma estructural al sistema, "que necesariamente involucre la laboralización del talento humano, garantizando los recursos para ello y así lograr saldar una gran deuda con los trabajadores de la salud que a su vez son los que le han estado enfrente de la pandemia".
Además, agrega la directiva, hay dos retos fundamentales que pasan por el fortalecimiento del hospital público, "garantizando su sostenibilidad y no que su funcionamiento dependa de la venta de servicios" y, en ese orden de ideas, "generar una política que garantice a largo plazo el sostenimiento de la infraestructura hospitalaria que se incrementó y fortaleció para responder a la pandemia"