Ya quedó en firme el histórico decreto del Ministerio de Hacienda que cambia, radicalmente, la forma en la que funcionan los créditos del Icetex para financiar la educación superior de los estudiantes que no tienen dinero suficiente para pagar de contado las matrículas universitarias.
La normativa plantea un modelo de pago “contingente al ingreso”. Esto significa que las cuotas de los créditos se cobrarán dependiendo del nivel de ingresos.
EL COLOMBIANO le explica todos los detalles de la nueva medida que está planteada para ser un alivio a los deudores.
¿Quiénes pueden aplicar?
De acuerdo con el Decreto 1009 del Ministerio de Hacienda, los cambios regirán a partir del 2023 y no tienen una aplicación retroactiva. Es decir que los actuales deudores no se verán cobijados por el nuevo modelo de pago.
En ese sentido, quienes podrán acogerse a estas nuevas condiciones son todos los estudiantes de educación superior que deseen financiar sus matrículas una vez el Icetex reglamente las nuevas condiciones.
De acuerdo con Iván Morales, jefe de Planeación del Icetex, en la práctica las modificaciones comenzarán a regir a partir del 2023.
Esto se debe a que el decreto le da al Icetex seis meses para “implementar todas las actividades que le permitan la puesta en operación del mecanismo de pago contingente al ingreso”.
¿En cuánto queda la cuota?
Hay dos criterios que usa el nuevo decreto para determinar cuál será el valor de las cuotas. Por un lado está el monto de los ingresos de los egresados –que deben ganar al menos un salario mínimo mensual legal vigente (Smlv)– y por el otro, el monto de la deuda.
Así pues, las personas que ganen entre uno y dos Smlv y paguen una deuda de menos de 24 Smlv tendrán que destinar al pago el 9,5 % de sus ingresos . Si la deuda es igual o superior a 24 Smlv, tendrán que pagar el 11,5 %.
Quienes ganen más de 2 Smlv y hasta 4 Smlv tendrán que pagar el 15 % de sus ingresos si la deuda les cuesta menos de 24 Smlv. Si la deuda es igual o superior a 24 Smlv, tendrán que destinar a ella el 17 % de su salario. Entre más alto el ingreso y el monto de la deuda, más alto será el porcentaje de la cuota (ver imagen anexa).
Así funcionarían los pagos
En la actualidad el grueso de las deudas con el Icetex se pagan a través de consignaciones, en un proceso que es similar al pago de un recibo de servicios públicos.
Pero lo que plantea este nuevo decreto es que los porcentajes de los pagos se descontarán directamente del sueldo en coordinación con la Dian y las empresas donde trabajen los estudiantes.
Con ello, son las empresas las que tendrán que pagar esa plata “dentro de los primeros diez (10) días siguientes al mes en que se efectuaron las respectivas deducciones y retenciones”, según reza la nueva norma. Podrán realizar estos pagos a través de los bancos y las entidades autorizadas por el Icetex.
Esta solución, sin embargo, ha recibido cuestionamientos de parte de algunos sectores estudiantiles. Daniel Torres, representante de los deudores del Icetex, aseguró que esto podría incidir negativamente en las posibilidades que tienen los egresados universitarios de conseguir trabajo.
“Cada vez que las empresas deban emplear a alguien, tendrán que verificar si es usuario del Icetex”, dijo Torres. “Obviamente, cualquier empresa lo va a pensar dos veces antes de contratarlos”, concluyó.
¿Y si pierden el trabajo?
Una de las nuevas medidas que trajo este decreto apunta, precisamente, a proteger a los deudores del Icetex que estén desempleados o que ganen menos de un Slmnv.
“Digamos que la persona trabaja 11 meses al año, y el otro está desempleada. En ese caso va a tener la obligación de pagar conforme los ingresos que reciba en esos 11 meses. Pero en el mes en el cual no recibe sueldo, no tendría la obligación de pagar”, explicó Iván Morales, funcionario del Icetex.
Esta medida, sin embargo, también ha sido criticada por los estudiantes, pues si bien se suspende el cobro de las deudas mientras los usuarios de Icetex están en difíciles situaciones económicas, los intereses siguen corriendo.
EL COLOMBIANO le consultó a Morales cómo funcionarían los intereses tanto en los períodos de desempleo como en durante el tiempo de amortización. El funcionario advirtió que esos intereses existirán.
20
años es el plazo máximo para pagar la deuda, luego simplemente se cancela.