Después de que se conociera la muerte violenta de 26 personas en Arauca por enfrentamientos entre las disidencias de las Farc y el Eln, la Defensoría del Pueblo lanzó una alerta temprana por las posibilidades de que el conflicto cause más afectaciones en ese departamento.
“Hacemos eco del llamado de las comunidades para que los grupos armados ilegales respeten a la población civil, para que la mantengan al margen de sus actividades, para que cesen los homicidios en su territorio, para que no se recluten menores de edad”, manifestó el defensor del Pueblo, Carlos Camargo.
Esta institución también señaló que ha atendido el desplazamiento forzado de 53 familias, de Tame y Saravena, que han salido de sus territorios porque “temen resultar afectadas por las acciones de los grupos armados”.
Así mismo, la Defensoría advirtió que en Arauquita se reportó el desplazamiento de dos familias y un deplazamiento intraurbano en Fortul.
El incremento de la violencia en ese departamento se detonó tras el asesinato en Venezuela de Álvaro Padilla Tarazona, alias Mazamorro, segundo cabecilla del frente Domingo Laín Saenz del Eln. A partir de ahí los enfrentamientos entre las disidencias del frente décimo de las Farc y el Bloque de Guerra Oriental del Eln se recrudecieron.
Por esta situación la ONU hizo un llamado al respeto por el Derecho Internacional Humanitario y los Derechos Humanos de la población civil.