La Fiscalía reiteró la calificación de los homicidios de Mario Calderón Villegas, Elsa Alvarado Chacón, Carlos Alvarado Pantoja, y el homicidio en grado tentativa de Elvira Chacón de Alvarado, como delitos de lesa humanidad.
A pocos días de cumplirse 20 años de este crimen, pues los hechos sucedieron el 19 de mayo de 1997 en Bogotá, cuando hombres fuertemente armados ingresaron a su apartamento y dispararon indiscriminadamente contra los ocupantes.
Para adoptar esta decisión, el ente fiscal sostuvo que “los delitos fueron cometidos dentro de un plan sistemático y generalizado contra la población civil”. Mario Calderón Villegas y su esposa Elsa Alvarado Chacón pertenecían a la ONG Cinep.
La investigación de la Fiscalía permite señalar como presuntos autores a Diego Fernando Murillo Bejarano, alias “Don Berna”, y a los hermanos Carlos y Fidel Castaño Gil.
Igualmente, se condenó a 40 años de prisión como coautor responsable de estos homicidios a Juan Carlos González Jaramillo.
Actualmente a la investigación se encuentra vinculado el coronel retirado, Jorge Eliécer Plazas Acevedo, a quien se le impuso medida de aseguramiento al ser señalado como presunto coautor del delito de homicidio agravado en concurso con los delitos de tentativa de homicidio y concierto para delinquir.
Por tratarse de un delito de lesa humanidad la acción penal originada por estos homicidios no prescribe y permitirá a la Fiscalía seguir con las investigaciones y hallar a los demás responsables de este crimen.
La Comisión Colombiana de Juristas, en su calidad de representante judicial de las víctimas, había solicitado el pasado 7 de abril de 2017 que estos crímenes se declararan expresamente como delitos de lesa humanidad, al considerar que, junto a otros homicidios, como el de Jesús María Valle Jaramillo, Eduardo Umaña Mendoza y Jaime Garzón, fueron parte de la ejecución de un plan de carácter generalizado y sistemático en contra de defensores de derechos humanos.