Jair Sánchez Hernández, alias “Mueble Fino”, uno de los últimos cobradores del Cartel del Norte del Valle, llevaba quince días escondido en Bogotá.
“Mueble Fino”, quien había sido víctima de un atentado en la casa de su hija en el barrio Ciudad Jardín en febrero pasado, fue sorprendido cuando llegaba a una clínica de la capital, donde le realizaban chequeos médicos.
Este hombre, solicitado en extradición según fuentes de inteligencia, tenía contactos con las autoridades estadounidenses. Meses atrás, su jefe “Kike” Jaramillo -señalado como uno de los últimos capos importantes del país, pero que durante años manejó un bajo perfil- se había entregado a la DEA en Estados Unidos. Actualmente, está preso en una cárcel de Nueva York.
En total, según las autoridades, cinco miembros de las antiguas estructuras de los carteles de Cali y del Norte del Valle -quienes por décadas lograron pasar desapercibidos para las autoridades tanto colombianas como estadounidenses- hicieron contactos con la DEA para su entrega.
Los contactos de “Mueble Fino” con las autoridades estadounidenses, habrían llevado a que Dairo Antonio Úsuga David alias “Otoniel”, jefe de los”Urabeños”, ordenara el ataque contra Sánchez.
Eso sumado, a la intención de “Otoniel” de apoderarse del control de las rutas del narcotráfico en el Pacífico ocasionó una disputa entre los antiguos “Machos” y sus ex socios los “Úsuga”, así como con los reductos de los “Rastrojos”. Estas son las tres bandas criminales derivadas del narcotráfico que tienen una mayor injerencia en el país.
Los miembros de la Policía Antinarcóticos que le seguían la pista desde su salida de la Clínica Valle del Lili en Cali, semanas atrás, descubrieron que se cambiaba constantemente de vivienda, huyendo tanto de las autoridades como de sus enemigos que querían asesinarlo.
Fuentes de la Policía revelaron que el día de su captura Jair Sánchez llegó a la clínica escoltado por seis personas armadas, quienes tenían carnets de una empresa de seguridad y las armas de fuego que portaban estaban amparadas y a nombre de dicha empresa.
Según la Policía, alias “Mueble Fino” estuvo al servicio de “Kike” Jaramillo, señalado de ser uno de los narcos más poderosos en el país. Jaramillo se entregó a la DEA en diciembre del año pasado y alias “Mueble Fino”, habría quedado encargado de su organización.
El fin de semana pasado llegó la solicitud de extradición por un proceso que se adelanta en su contra en una Corte del Distrito Sur de la Florida por el delito de conspiración para importar cocaína.
La acusación contra este hombre, de 49 años, se realizó con la colaboración, tanto de su antiguo jefe, como del capo del Cartel del Norte del Valle Ramón Quintero, “RQ” (detenido en Ecuador en 2010 y extraditado un año después a Estados Unidos) y su subalterno alias “Pelo de Cobre”.
