La Registraduría Nacional y el Consejo Nacional Electoral (CNE) le salieron al paso a la controversia por supuestas irregularidades en las elecciones a Congreso y entregaron un avance del escrutinio de los votos con el que el Pacto Histórico, de Gustavo Petro, saldría beneficiado con la suma de al menos tres curules más.
En una breve declaración en la que no se permitió que los periodistas hicieran preguntas, el registrador Nacional, Alexánder Vega, dio a conocer los resultados del reconteo de los votos de las elecciones de Senado, y con un avance del 97 % se informó que la lista de los de Petro obtuvo 390.152 sufragios adicionales.
En el reporte oficial se informó que esa lista de partidos y movimientos de izquierda fue la ganadora de la votación de Senado del pasado 13 de marzo con 2.692.999 votos, seguida por el Partido Conservador (2.201.183 votos); el Partido Liberal (2.078.858 votos); la coalición Alianza Verde y Centro Esperanza (1.906.021 votos), y el Centro Democrático (1.874.762 votos).
Vega desestimó las versiones de supuesto fraude por la amplia cifra de votos del Pacto Histórico que no se registró en el preconteo y prefirió no aclarar cuántas curules adicionales podría tener el Pacto Histórico con los de 390.000 votos adicionales hasta que el CNE no apruebe el escrutinio final del 100 % de las mesas.
A falta del 3 % restante del escrutinio, los cálculos de la opinión pública hablan apuntan a que el Pacto Histórico podría aumentar al menos tres curules en el Senado y a su vez perderían de a un escaño el conservatismo, los verdes y la colectividad del expresidente Álvaro Uribe, que alzaron su voz de reclamo.
Las cuentas del petrismo
Al comparar las cifras del preconteo que tuvo un 99,41 % de mesas escrutadas con las entregadas por las autoridades electorales este viernes, el Pacto Histórico pasó de 2,3 millones a 2,69 millones de votos y el total podría aumentar este fin de semana al completarse el 100 % del escrutinio.
La coalición política congresional de Petro celebró estos resultados parciales y aseguró que se pretendía consumar un fraude por los miles de votos que no se registraron en el preconteo al parecer por parte de jurados de votación y señaló que con el escrutinio será en la fuerza política con más curules (19) en el Senado de la República, aunque sin mayorías (ver ¿Qué Sigue?).
Mientras en las toldas petristas se celebra, quienes perderían curules expresaron su voz de protesta por lo que aseguran sería un reconteo “sospechoso” que beneficiaría a la coalición de izquierda. Al respecto en el conservatismo se reclamó que “no es entendible que una organización política resulte beneficiada en la proporción que se anuncia y los demás carezcan de incrementos significativos”.
Desde el Centro Democrático se cuestionó que resulta “inaceptable” la situación de “incertidumbre” que les genera que consideran en una inexactitud de los resultados publicados por la Registraduría que modificarían de “manera sospechosa” los datos entregados el pasado domingo.
Por su parte, desde la Alianza Verde se exigió que la Registraduría adelante un reconteo general de los votos con el fin de “despejar cualquier manto de duda o fraude en estas elecciones”.
Y es que según los resultados parciales del escrutinio, los votos no crecieron en la misma proporción e incluso algunas cifras bajaron. Por ejemplo, el Conservador pasó de 2.213.528 a 2.201.183 votos y el Liberal de 2.074.408 a 2.078.858 votos. La coalición Alianza Verde y Centro Esperanza pasó de 1.956.985 a 1.906.021 votos. Por su parte, el Centro Democrático bajó de 1.929.370 a 1.874.762 votos y Cambio Radical de 1.610.656 a 1.586.284 votos. El Partido de la U pasó de 1.506.134 a 1.494.098 votos.
Lo cierto es que las controversias posteriores al preconteo y previas al 100 % del escrutinio son comunes en las elecciones. En los comicios de 2014 el partido Mira se vio afectado por problemas en la marcación de los tarjetones y tras interponer una demanda ante el Consejo de Estado logró recuperar tres curules. Y ante la controversia actual con los reclamos de diversos sectores políticos, la Registraduría aclaró que hubo inconvenientes típicos en las mesas.
¿Hubo errores humanos?
Ante la oleada de críticas que han recaído sobre la Registraduría, que incluyen pedidos de renuncia, el jefe de esa entidad aclaró que las aparentes equivocaciones que se dieron en la formulación de los formatos E-14 (ver Facsímil) las están corrigiendo los jueces en el proceso de escrutinio. “Lo que está ocurriendo en los escrutinios son temas normales de los votos de las mesas y se están corrigiendo los errores en que hayan incurrido los jurados de votación”, señaló.
En esa línea, Vega aclaró que se identificó que jurados de votación pusieron asteriscos en las casillas vacías de los formularios, por solicitud de los testigos electorales, lo que habría desencadenado en errores humanos que terminaron en “indebido diligenciamiento de los formularios”.
Por su parte, Alejandra Barrios, directora de la Misión de Observación Electoral (MOE), anotó que hubo “una serie de errores” durante las elecciones y señaló que “en este momento no vamos a hablar ni de suspicacias ni de sospechas de fraude. Lo que nosotros señalamos es que inicia una nueva parte del proceso que requiere vigilancia y ahí ha estado presente la MOE”.
Esta controversia en torno a las elecciones ha generado un escenario de suspicacia para las elecciones presidenciales que se avecinan, pero ante las dudas la Registraduría insistió en que habrá transparencia
3%
del escrutinio hace falta por completar para conocer los resultados definitivos.