El Centro Democrático se trazó, bajo la batuta de su máximo líder, el expresidente y exsenador Álvaro Uribe, un plazo de dos meses para definir el nombre de su candidato a la Presidencia. El 22 de noviembre es la fecha que se fijó para que militantes y electores –por medio de encuestas– decidan quién será la carta del partido para disputar la jefatura del Estado en las elecciones de mayo de 2022. Y todo se hizo con contundente mensaje político: la derecha también necesita coalición.
EL COLOMBIANO dialogó con Óscar Iván Zuluaga, el único precandidato de esa colectividad que apareció (como noveno con 3,6 %) entre los aspirantes con intención de voto en la encuesta de agosto de Invamer. Sin embargo, en la del Centro Nacional de Consultoría de septiembre despuntó María Fernanda Cabal. Zuluaga habló de este proceso, al que también se suman Edward Rodríguez, Paloma Valencia y Rafael Nieto, al igual que de sus propuestas y de la necesidad de unión.
¿Cuál es la principal bandera de su proyecto político?
“Mi propuesta es la generación de dos millones de empleos dignos y bien remunerados, que le permitan a jóvenes acceder a oportunidades en sus regiones, empleo que permita fortalecer el desarrollo de sectores estratégicos como el agroindustrial. Colombia puede ser un gran distrito agroindustrial para producir y exportar al mundo.
Por eso, es necesario que la educación esté enfocada hacia los sectores que realmente tienen hoy una gran demanda de empleo. Por ejemplo, Colombia hoy necesita 300.000 jóvenes formados en temas de transformación digital”.
¿Cómo garantizar que se generen esos empleos?
“Necesitamos tener un crecimiento vigoroso y una deuda pública sostenible. Es indispensable que el 8 de agosto de 2022 se presenten las reformas fiscal, laboral y pensional que generen condiciones para que tengamos un crecimiento a tasas altas y una deuda pública sostenible. La suma de esas tres estrategias es lo que va a permitir crear los dos millones de empleos bien remunerados que se necesitan para recuperar el bienestar de las familias y de los ciudadanos”.
¿Cómo hará para que esas reformas no terminen en nuevas protestas sociales?
“La clave es el enfoque de las reformas. Mi propuesta es hacer una reforma fiscal y laboral, no para subir tasas o afectar derechos adquiridos de trabajos, sino para incentivar la formalización, porque al menos el 50 % de nuestra economía es informal, tenemos 10 millones de colombianos que están en la informalidad. Deben ser reformas que motiven la formalización. En la reforma fiscal se debe incluir el desmonte de exenciones, el poder reestructurar y reformar la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) para que sea exitosa en la lucha contra la evasión y el contrabando. Estimo que ese solo hecho nos podría dar 1,5 % del PIB en mayores recaudos.
En cuanto a la reforma laboral se trata de una propuesta que incentive la formalización para lograr que esas personas que hoy no cotizan a la seguridad social lo hagan, y eso se hace a través de estímulos, de temas mucho más flexibles, de unas tarifas más competitivas. En el tema pensional hay que acabar el subsidio de las pensiones altas, respetando los derechos adquiridos, porque son los salarios de más alto valor los que se llevan una gran tajada del presupuesto nacional. El subsidio a las pensiones de salarios altos nos cuesta 20 billones de pesos al año, eso no es viable, es injusto y no es sostenible”.
Algunos cuestionan su liderazgo en el Centro Democrático, ¿cuál es su respuesta?
“Confío en mi proyecto y serán los militares del partido y los colombianos quienes definirán cuáles son las mejores propuestas y cuál será el candidato a la Presidencia, y yo me he venido preparando desde hace muchos años. Yo soy fundador del partido, tengo 30 años de servicio al país y 20 años de ser un empresario. Estoy compartiendo mis propuestas a todos los integrantes del partido y al país, y representan una solución a los problemas del país”.
¿El mecanismo para elegir el candidato del partido lo eligió Álvaro Uribe o el partido?
“Fue una decisión de consenso dentro de la colectividad. Se definió un sistema de encuestas, pero no se ha establecido cómo será esa metodología para consultar a todo lo que es la base de simpatizantes y personas que se han sentido identificadas con las ideas que lidera el Centro Democrático. Se decidió fortalecer el interés de buscar una coalición política con otros sectores, promoviendo una consulta interpartidista en marzo de 2022”.
¿Cuáles sectores estarían incluidos en esa coalición?
“Pensar en los problemas del país significa unirse con otros sectores. Podemos hablar de Federico Gutiérrez, Enrique Peñalosa y partidos como el Conservador, Cambio Radical, la U, los grupos cristianos. Se debe construir una alianza que nos lleve a buscar un solo candidato en la primera vuelta. Hoy tenemos la responsabilidad de pensar en el país para proteger nuestra democracia y evitar esa amenaza que representa el socialismo, la izquierda populista”.
¿Con esa amenaza se refiere al proyecto de Gustavo Petro?
“Claro, él y otros que tienen que definir posturas más claras, porque hay otros proyectos que desde la centroizquierda tienen ideas muy comunes a lo que plantea un proyecto de populismo como el que representa Gustavo Petro. Necesitamos unirnos para derrotar con votos todas esas alternativas que representan un riesgo para Colombia en lo relacionado con el debilitamiento del sector privado, los valores esenciales y las libertades personales”.
¿Está haciendo referencia a los de la Coalición de la Esperanza y a Alejandro Gaviria?
“Sí, me refiero a ese sector de la centroizquierda que propone legalizar el aborto, el consumo de drogas, que significa pérdida de los valores fundamentales en la defensa de la familia y de la libertad”.
¿Siendo presidente estaría dispuesto a sentarse con ellos en esa idea de unir al país?
“Sí, con ellos y con los demás sectores de la sociedad. Cuando un presidente toma posesión tiene que pensar en cómo unir a los colombianos y en ese propósito de unión tiene que buscar causas en las que todos puedan ser incluidos. Una de esas causas para mí es la lucha contra la corrupción; en ese tema estoy proponiendo un acuerdo fundamental para hacer la reforma a la política y la reforma a la justicia. Un proyecto de esas características debe ser producto de un acuerdo de los diferentes sectores sociales y políticos”.
En 2018 se habló de una distancia entre usted y Uribe. ¿Cómo está esa relación?
“La relación con el expresidente es inmejorable. Él es una persona a la que yo respeto y aprecio y con quien he trabajado en los últimos 20 años. En su momento el dar un paso al costado para poderme dedicar a aclarar los temas judiciales fue lo correcto. Ya hoy el país conoce la verdad judicial y se comprobó lo que yo siempre dije, que mi campaña en 2014 fue honorable y siempre actué ajustado a la ley”.
¿En qué quedaron esos procesos en su contra?
“Los procesos que tienen que ver con el hacker Andrés Sepúlveda se ganaron en todas las instancias judiciales y en el tema de Odebrecht también hemos avanzado suficientemente con todo el material probatorio que tiene la Fiscalía en su poder, que comprueba que mi campaña actuó de manera correcta, que hubo ningún acto ilícito. Ya el tema quedó resuelto y por eso tengo esta tranquilidad para poner a consideración mi nombre a la Presidencia”.
¿Qué rescata y qué critica del gobierno de Iván Duque?
“El manejo de la pandemia ha sido exitoso, tenemos hoy más de 35 millones de colombianos vacunados, este vamos con una recuperación acelerada de la economía. Además, rescato programas como Ingreso Solidario con el que tres millones de colombianos en condiciones de pobreza extrema hoy reciben apoyo. Hay errores y yo lo he señalado. Por ejemplo, yo hubiera militarizado el Puerto de Buenaventura en la crisis de mayo y junio de este año, allí se requería un ejercicio de autoridad de ese nivel. Además, me parece que es necesario acelerar el retorno de la aspersión aérea con glifosato, el narcotráfico es el gran cáncer de la sociedad, eso es crucial porque hoy está llegando a Colombia fruto de la producción de cocaína miles de millones de dólares para el financiamiento de las organizaciones criminales”.
¿Eso quiere decir que la seguridad será su foco clave?
“Sí. Hoy el gran dominante para el tema de la inseguridad es el narcotráfico y es nuevo el fenómeno del terrorismo urbano y ahí hay un desafío nuevo desde el punto de vista de autoridad. Considero que se requiere una acción decidida y coordinada entre los gobiernos nacional y local, la Policía y las organizaciones de inteligencia, pero acordados con la comunidad.
Cuando se mira el problema en esa integralidad se entiende lo que está en juego. Ahí es donde tiene que haber un gran liderazgo desde el Presidente de la República como comandante en jefe de las Fuerzas Militares para motivar a las autoridades, los alcaldes y a la comunidad de aliarse para enfrentar a la delincuencia. Hoy la inseguridad es como una nueva pandemia en Colombia, porque a los ciudadanos les da temor salir a la calle porque los pueden matar por robarles un celular, una bicicleta o una moto. Ahí se requiere una acción decidida para poner el tema de la seguridad como prioritario”.
¿Cree que ese liderazgo le faltó a Duque?
“Falta reforzarlo mucho más”.
¿Le preocupa llevar a cuestas la desaprobación del 75 % del Presidente?
“No. Yo creo que el Gobierno puede mejorar su apreciación y percepción ciudadana. La reforma fiscal actual permitirá extender los programas sociales y ayudará a colombianos que han sufrido con la pandemia. Todavía hay tiempo para que los colombianos puedan valorar de mejor manera las acciones del presidente”
De ser elegido como el candidato presidencial del Centro Democrático, Óscar Iván Zuluaga tratará de acercar a las candidaturas de derecha para consolidar una consulta interpartidista para marzo de 2022.
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grandes reformas propondría Zuluaga si fuera presidente: fiscal, laboral y pensional.
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millones de empleos propone generar Zuluaga si llega a la Presidencia de la República.