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Las posibles irregularidades que le investigan al saliente director de la Aerocivil
La Contraloría investiga contratos que suman 13.000 millones de pesos. Fajardo era una cuota del Partido Conservador.
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Jair Orlando Fajardo, exdirector de la Aerocivil. FOTO Cortesía -
Hallazgo de la Contraloría sobre aeropuerto José M.C.
08 de julio de 2022
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Tras meses de disgustos y especulaciones sobre su administración, el director de la Arocivil, Jair Orlando Fajardo, fue declarado insubsistente por el presidente Iván Duque, quien lo habría retirado de su cargo por presuntos líos de corrupción que estarían retrasando el avance de obras tan importantes como el ampliamiento de los aeropuertos José María Córdova, en Antioquia; El Embrujo, en Providencia; y el proyecto de construcción del aeropuerto del Café, que beneficiaría a Risaralda, Caldas y Quindío.
La polémica por los supuestos líos fue tal, que horas después de su despido se conoció una explosiva auditoría de la Contraloría General de la Nación –en poder de EL COLOMBIANO– en la que se denuncian 21 hallazgos administrativos con posibles irregularidades por parte de la Aerocivil.
De ese total de hallazgos, el ente de control aseguró que 14 de ellos tendrían alguna repercusión disciplinaria y que cuatro podrían tener incidencia fiscal por más de 13.000 millones de pesos. Estos últimos, según aseguró la Contraloría, fueron trasladadas a las instancias competentes para realizar el respectivo control y dar lugar a las sanciones necesarias.
El documento técnico contiene 218 páginas y detalla la revisión de cada una de los contratos problemáticos que suscribió la Arocivil durante el 2021. Pese a que solo enuncia lo que ocurrió el año pasado, la auditoria apenas fue entregada el pasado mes de junio, por lo que se habría convertido en uno de los detonantes para que la ministra de Transporte, Ángela María Orozco, pidiera su cabeza.
Un par de horas después de ser retirado de su cargo, Fajardo emitió un comunicado defendiéndose de las acusaciones y anunciando posibles acciones legales contra quienes lo relacionaran con “irregularidades” sin justificación.
“Yerran algunos comunicadores al vincular la insubsistencia a hechos irregulares. Tales yerros están siendo analizados por un equipo legal”, escribió Fajardo.
Dos contratos millonarios
Los líos que cobijarían al entonces director de la Aerocivil empezaron por el aeropuerto José María Cordova (de Rionegro), que es el segundo más importante del país, solo superado por El Dorado, de Bogotá.
Según la auditoría, la Aerocivil firmó un contrato para los estudios y diseños de una pista adicional en el JMC que costaría un total de 7.500 millones de pesos. Para dicho fin le entregó al contratista un anticipo por 1.125 millones y otro dinero para la Fase 1 por 2.358 millones más.
Pese a esas sumas, el contrato no llegó a buenos términos y quedó incompleto, por lo que la Contraloría alertó por un posible “daño al patrimonio del Estado” por 3.400 millones de pesos.
Pero ese no fue el único proyecto en veremos. Otra revisión de la Contraloría halló que la Aerocivil suscribió otro documento en 2020 con el objetivo de construir la torre de control del aeropuerto El Embrujo, de Providencia. Pese a que el contratista tuvo 19 meses para ejecutar la obra, el contrato tuvo que ser terminado en septiembre de 2021 –durante la administración de Fajardo– porque no se estaba “amortizando” de manera adecuada. Lo que significa que la entidad no estaba cumpliendo con su parte del trato.
Solo en dicha obra, la Contraloría asevera que los 3.180 millones de anticipo se perdieron y generaron otro daño patrimonial por “la no ejecución de las obras”.
El aeropuerto del café
Además de esos millonarios contratos que quedaron incompletos y aún están siendo investigados, la verdadera piedra en el zapato de la administración de Fajardo fue Aero Café, un proyecto para construir un aeropuerto en el Eje Cafetero que empezó en 2004 y aún no se hace plausible.
Según fuentes cercanas a la Aerocivil, el presidente Duque quería entregar ese proyecto antes de dejar la Presidencia, un hecho que fue imposible ante la lentitud de las obras. Tras analizar una reserva presupuestal de 100.000 millones de pesos para esa obra que finalmente no fueron ejecutados, la Contraloría también afirmó que “el alcance físico y presupuestal del proyecto es insuficiente”.
Esto último habría sido la copa que rebasó el vaso, pues la ministra Orozco fue muy insistente con él, incluso en eventos públicos, diciéndole que ese proyecto era clave para el Gobierno.
Se va una cuota del Conservador
Lo cierto es que Fajardo no fue muy recibido desde el principio. Según funcionarios cercanos a esa cartera, la ministra Orozco había postulado a su viceministra, Carmen Ligia Valderrama, para que ocupara el cargo.
Pese a eso, en los círculos políticos aseguran que Fajardo llegó como una cuota del Partido Conservador y del actual presidente del senado, Juan Diego Gómez, por lo que el presidente Duque lo habría preferido por encima de las recomendaciones de su gabinete.
Tras ser consultado por EL COLOMBIANO, Gómez reconoció que sí es amigo cercano del exdirector, pero negó tajantemente que hubiera llegado a ese cargo por recomendación suya.
Por ahora, el Jefe de Estado designó como director encargado al ingeniero Francisco Ospina, quien deberá encarar los líos pendientes que dejó Fajardo y terminar el empalme con el gobierno entrante.
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