El Gobierno Nacional había proyectado que solo en septiembre llegarían 12,7 millones de dosis de vacunas anticovid. Sin embargo, ad portas de que acabe el mes se han recibido 9,5 millones de dosis. Colombia, entonces, se quedó esperando 3,2 millones de dosis.
De acuerdo con los registros compartidos por el Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), hubo casas farmacéuticas que enviaron menos dosis de las que se esperaban y otras que, en cambio, mandaron más.
El laboratorio que más vacunas le quedó debiendo al país fue Moderna. Si bien el Ministerio de Salud había presupuestado que para septiembre llegarían 4’080.000 dosis anticovid de esa farmacéutica, hasta ahora se han recibido 689.220 dosis y solo se han distribuido 332.640 dosis entre los entes territoriales.
Esto implica que cerca de 3,2 millones de personas que requieren una segunda dosis de esa vacuna no han podido acceder a ella.
También hubo otros envíos que no se dieron o que no se ajustaron a las expectativas que tenía el Ministerio de Salud. El mecanismo Covax tiene pendiente entregar 998.420 dosis de Pfizer y la donación de vacunas de AstraZeneca que hizo España trajo 159.400 dosis menos de las presupuestadas.
Sin embargo, la meta de vacunas adquiridas no quedó más rezagada debido a que hubo envíos que fueron más robustos en comparación a las proyecciones que se hicieron a inicios del mes. Por ejemplo, AstraZeneca y Janssen enviaron 539.000 y 834.700 dosis anticovid más de las que se esperaban, respectivamente.
El lío con Moderna
El sábado pasado el Ministerio de Salud distribuyó 332.640 dosis de Moderna, pero en las bodegas que tiene esa cartera ministerial en Bogotá aún hay otras 356.580 que todavía no han sido distribuidas. Esto se debe a que unos certificados de calidad de las vacunas aún no estaban listos.
Recientemente, el director del Dapre, Victor Muñoz, informó que se espera que en las próximas horas se revise esa documentación, para que se liberen las dosis anticovid que faltan por entregarse en todo el país.
Asimismo, agregó que este jueves 30 de septiembre podrían llegar 1,4 millones de dosis de Moderna que serían recogidas este miércoles.
Este anuncio, no obstante, llegó con varios días de retraso. Muñoz había señalado que el pasado sábado 25 de septiembre se iban a recoger dos lotes de dosis anticovid en la ciudad de Memphis, Estados Unidos.
Asimismo, varias autoridades locales volvieron a reportar escasez de las vacunas de Moderna, pues ya inyectaron las que les había enviado el Ministerio de Salud desde el sábado.
El secretario de Salud de Bogotá, Alejandro Gómez, dijo el pasado martes 28 de septiembre que se habían terminado las existencias de esas vacunas. “Quedamos a la espera de nuevas entregas de esta vacuna pues nos faltan muchas personas por sus segundas dosis”, aseguró.
Las autoridades de Cartagena también señalaron que no contaban con más dosis de Moderna, pues se las suministraron a sus habitantes en casi 72 horas. Asimismo, en Cali las autoridades ya advirtieron que cuentan con poca disponibilidad de esos medicamentos.
Y desde la Secretaría de Salud de Medellín le dijeron a este medio que en el último corte de cuentas la ciudad contaba con 10.835 dosis de Moderna, de las 21.784 que le había enviado el Gobierno Nacional.
Falta de vacunas
EL COLOMBIANO ya había advertido desde la semana pasada que la aceleración de la llegada de vacunas era clave para conseguir que el 70 % de la población se vacune completamente contra el covid-19 antes de que termine el año, una meta que se había trazado el propio Gobierno Nacional.
“Mientras más personas estén sin vacunarse, aumentan las probabilidades de que más personas desarrollen formas graves de la covid-19. Esto puede conducir a más hospitalizaciones y más casos de ingresos a Unidades de Cuidados Intensivos, por lo cual también puede aumentar la mortalidad”, aseguró Luciano Vélez Arroyave, médico Especializado en. Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Antioquia.
Según proyecciones del Ministerio de Salud, el cuarto pico podría llegar en octubre y sería impulsado por la variante delta, que cobra fuerza con cada nuevo reporte genómico del Instituto Nacional de Salud.