Un grupo de jóvenes colombianos, bajo la batuta del antioqueño Juan Sebastián Quebrada Vásquez, conspiraron en Buenos Aires y le dieron vida al largometraje Días Extraños. Hoy, esta coproducción colombo-argentina se estrena en el Bafici, el festival de cine independiente más importante del país gaucho, donde compite en la muestra central del evento.
Ad portas de su presentación, EL COLOMBIANO dialogó con Juan Sebastián Quebrada, quien está radicado hace siete años en Argentina y a sus 27 años despunta como un director para tener en cuenta en el cine colombiano.
¿De dónde nació este proyecto?
“Surgió de un ejercicio práctico cuando estaba cursando el último año en la Universidad del Cine (FUC). El reto consistía en grabar una escena semanal de algo. Cuando mostrábamos el material a la siguiente clase veíamos cómo los compañeros se enganchaban con la trama, con los personajes y cada vez nos exigían más. En un principio no hubo un guión como tal, la historia se fue encaminando”.
¿De qué trata Días Extraños?
“Es básicamente una historia de amor. Una relación sentimental de dos colombianos que se encuentran por fuera de su país y que se acompañan en medio de sus soledades y se atormentan entre sí. Entre más daño se hacen parece que se necesitaran más para vivir”.
Buenos Aires está repleto de extranjeros, ¿es una película sobre la migración?
“Es una historia que se podría producir en cualquier espacio. De hecho en la película no aparecen argentinos, se centra más en lo que la pareja experimenta y en los límites que cada uno va transgrediendo”.
¿Resulta muy costoso hacer cine en Argentina?
“Comenzamos con las uñas, sin un mango (peso), recogiendo en bicicleta por la mañana los equipos prestados para rodar a la tarde. Se fue uniendo gente al proyecto y en la postproducción nos ganamos una convocatoria del Fondo Metropolitano de las Artes que consistió en un auxilio económico para poder terminarla”.
¿Qué referentes del cine colombiano tiene?
“En Colombia admiro el cine de Víctor Gaviria en especial por lo que hizo en Rodrigo D: no futuro. Valoro mucho y me sorprendió cuando conocí el trabajo de Óscar Ruiz Navia (El vuelco del cangrejo) y de Rubén Mendoza (Memorias del calavero)”.
¿Se puede ver la impronta del director con una sola película?
“Fue un aprendizaje completo, sentí que entendí muchas cosas y que fui encontrando un estilo en los planos largos, el desarrollo dramático que tienen y en el ritmo de la narración. También en temáticas, que seguramente van a volver. Igual soy consciente que definirse con un solo largometraje es muy anticipado”.
¿Qué espera del Bafici?
“La idea es que sea la plataforma para viajar por el mundo. Confío en que pueda estar en algún festival europeo clase A como el de Venecia o el de Locarno (Suiza). También me gustaría participar en 2016 en Cartagena”.
¿Cuántos colombianos participan en Días Extraños?
“Los roles principales son de colombianos. Los actores principales, el director de fotografía, la música que está muy buena y está a cargo de mi hermano Carlos Quebrada y las funciones que yo cumplí además de director”.
¿Hay algún otro proyecto en mente?
“Claro que sí, ya tengo algo escrito y la idea es que mi segunda película se pueda grabar, con buena parte del equipo que participó en Días Extraños, en territorio colombiano”.