Cuando Carmen se estrenó, en 1875, el recibimiento inicial fue nefasto. En París, la ópera de Georges Bizet era rechazada por un público que no veía como algo común que hubiese una como Carmen: una mujer libre, trabajadora de una fábrica de cigarrillos, quien decidía por ella misma y predicaba un amor indomable.
La que se convirtió en la obra más popular de Bizet, y que narra el trágico desenlace entre Don José, un soldado venido a menos y enceguecido por los celos, y esta mujer que es asesinada como consecuencia de no haberlo escogido a él como amante, después gozaría de mucho éxito en Viena. Poco después de la muerte de su autor, en junio de 1875, se convertiría en una de las óperas más representadas y conocidas de la historia.
Una de las cosas que causó revuelo cuando se estrenó fue que “el compositor trastocó el concepto que había de los personajes en ese momento”, cuenta Luz Marina Monroy, docente de Historia de la Música de la Facultad de Artes de la Universidad de Antioquia.
En un principio, el que se suponía que debía ser el héroe, el tenor, ahora ocupaba el rol de villano encarnado en Don José. El que se suponía debía ser un promulgador de la justicia, un hombre íntegro y protector, lo “vemos desmoronarse (a Don José) hasta convertirse en el hombre minúsculo que es”, señala.
La puesta en escena
Esta vez, bajo una premisa de “respetar los derechos y la libertad de la mujer y condenar el feminicidio, que no solo sucede en la ópera sino, tristemente, en la vida cotidiana”, apunta el concertino de la Filarmed, Gonzalo Ospina, se presentará una versión adaptada de esta ópera, con algunas modificaciones.
Solo contará con dos personajes en escena y una orquesta reducida, porque en tiempos de pandemia es imposible hacer la puesta en escena completa sin que la orquesta, los cantantes y todo el equipo de trabajo que se requiere se pusieran en riesgo.
Será ambientada en una Medellín del siglo XX con reminiscencias fotográficas de la cárcel de la Ladera y el Circo Teatro España, entre otros espacios. Fue grabada esta semana, pero será transmitida el sábado a través de los perfiles de Facebook y YouTube de la Filarmed a las 7:00 p.m.
Esa fuerza femenina
La mezzosoprano Laura Mosquera interpreta a la protagonista, a quien ella se refiere como una mujer que no respeta las reglas, que “es un arquetipo de la mujer libre, que vive el día, lo disfruta y lo hace a su manera”. Siente que tiene esa filosofía carpe diem. “Ella es consciente de que la muerte puede venir en cualquier momento”, entonces está encerrada entre esas dos realidades, dice la cantante. “Creo que sabe que va a vivir joven por la manera como vive”.
Añade que, por supuesto, esa mentalidad aplica a las escogencias amorosas de este personaje. “Ella solo va a estar con un hombre hasta el momento en el que decida estarlo. Eso es precisamente lo que trae el conflicto tan grande con Don José. Él fue criado con otra idea de que la mujer debe ser fiel y completamente suya. La tragedia es que él se enamora de una libre y él no logra aceptar eso”.
Ante el desenlace fatal de esta historia inspirada en la novela bajo el mismo nombre de Prosper Mérimée, el mensaje de la Filarmónica es claro: a la mujer se le debe respetar y nada, mucho menos expresar su pensamiento o libertad, justifica la violencia.