El escáner, como se conoce hoy, nació en 1984, con el fin de digitalizar imágenes. Antes, ¿cómo se hacía para incluir imágenes en publicaciones periódicas si los periódicos han existido desde el siglo XVI?
“Cada época tiene la manera de resolver sus necesidades con la tecnología que tiene disponible”, dice Ángel Ovidio González, director de la Biblioteca Pública Piloto, sobre la más reciente incorporación al Museo Cámara de Maravillas de la institución: una process camara, que se utilizaba alrededor de 1920 para ampliar o reducir imágenes como planos y mapas, para luego convertirlos en negativos que resultaban en planchas de impresión, que permitían la reproducción.
No era un proceso fácil, la cámara exigía una larga exposición y de tres a cuatro operarios. El foco y el fuelle se ajustaban usando manivelas, luego la imagen se proyectaba en el vidrio esmerilado, donde se ponía la película sensible. Después de exponer, se llevaba al cuarto oscuro y se revelaba. El negativo resultante se usaba para producir una plancha de impresión mediante algún proceso de transferencia.