Por John Eric Gómez Marín
La Copa Sudamericana ha sido un trofeo esquivo para Atlético Nacional, el único de los títulos continentales que no tiene en su vitrina. Por eso, desde este miércoles, buscará iniciar con pie derecho su participación en la edición 2020, ante el Huracán argentino, equipo con el que ya se sacó chispas en la Copa Libertadores de 2016.
La última vez que “El Globo”, como se le conoce popularmente a este club argentino, visitó el estadio Atanasio Girardot fue el 3 de mayo de 2016 por los octavos de final de la Libertadores.
Ese encuentro finalizó 4-2 a favor del elenco antioqueño después de un polémico arbitraje del venezolano José Argote, que fue calificado por el delantero Ramón Ábila Wanchope de “mamarracho” al final del partido.
Antes de esa serie de octavos de final, ambos equipos habían coincidido en la fase de grupos del torneo. El primer partido fue para Nacional que lo venció 2-0 y cuando el “Globo”, como se le conoce popularmente a ese club, visitó Medellín, el marcador fue 0-0.
La nómina que usó el técnico Reinaldo Rueda la última vez que se enfrentaron fue la siguiente: Franco Armani; Daniel Bocanegra, Felipe Aguilar, Dávinson Sánchez, Farid Díaz; Sebastián Pérez, Álex Mejía, Alejandro Guerra; Andrés Ibargüen, Marlos Moreno y Víctor Ibarbo.
Mientras que el club argentino jugó con Marcos Díaz; José San Román, Federico Mancinelli, Martin Nervo, Luciano Balbi; Matías Fritzler, Mauro Bogado, Cristian Espinoza, Daniel Montenegro, Mariano González; Ramón Ábila.
De esas dos nóminas únicamente hay un repitente: Mauro Bogado, de Huracán.
La rivalidad que generó tal enfrentamiento significó tanto para los hinchas argentinos que, cuando se conoció que ambos se volverían a enfrentar en esta Copa Sudamericana (17 de diciembre pasado), en menos de una hora de ese día, 3.349 trinos convirtieron a Atlético Nacional en la tendencia número 1 de Argentina.
La realidad hoy del club argentino es muy distinta. Marcha en la posición 20 en la Liga de ese país y hace poco más de un mes tiene nuevo técnico: Israel Damonte.
“Lleva muy poco tiempo como para definir su idea de juego y notar un cambio en el equipo”, comentó Nicolás Singer, periodista argentino que cubre habitualmente ese club.
“No atraviesa su mejor momento, está lejos de los puestos de protagonistas de la Superliga, la situación institucional y deportiva no es la mejor. Arrancó el torneo con un entrenador y después de la fecha 7 lo cambiaron porque no le iba bien, pusieron a un histórico que trabajaba en la cantera, Néstor Apuzzo, y ahora llegó Israel, que recién se retiró como jugador e inició su carrera como entrenador”, agrega Singer.
Por su parte, Nacional es el líder del torneo colombiano con una propuesta futbolística que convence en ataque y deja muchas dudas en defensa.
El miércoles le tocará tomar una ventaja importante para después viajar a Argentina, a disputar el duelo de vuelta, programado para el 19 de febrero, y cerrar la primera llave de un torneo que, para el técnico Juan Carlos Osorio es prioridad porque busca su primer título internacional con el verde n