“No hay enfermedad, sino enfermos”. La afirmación del médico deportólogo antioqueño Carlos Restrepo surgió mientras se refería a la sorprendente recuperación del ciclista Egan Bernal, luego de ser sometido a ocho cirugías y permanecer hospitalizado dos semanas, tras sufrir un grave accidente.
La misma sensación causó el deportista entre los aficionados, que festejaron al verlo este domingo de pie y posando junto a los especialistas de la Clínica La Sabana, a quienes les agradeció y reconoció su labor. “Esto para mí es como volver a nacer, gracias a su profesionalismo y trabajo duro. De no ser por ustedes, el final sería diferente”, comentó en rueda de prensa el cundinamarqués al ser dado de alta.
Ninguno de los galenos que han participado en el tratamiento de Egan está autorizado para referirse al tema en medios, pues ante la solicitud hecha por este diario señalaron que solo lo harán mediante comunicados de prensa.
Sin embargo, EL COLOMBIANO consultó a varios expertos para conocer de dónde sale tanta fortaleza en Bernal.
“La mente es más poderosa que cualquier dolor o situación y hace que el ser humano encuentre la sanación. Lo que toca ahora es esperar que Egan continúe su proceso de alivio. No dudo que lo hará, pues cuando uno ha ganado un Tour de Francia (2019) y un Giro de Italia (2021) significa que es un ser humano con mucha capacidad”, añadió Restrepo al recordar que ante la gravedad y complejidad de las lesiones del Cóndor de Zipaquirá habrá que tener paciencia y que aún no se puede vaticinar si volverá a tener su mismo nivel de competencia.
“Gracias a Dios no tuvo lesiones medulares. Es joven y tiene la fe, la voluntad y el ánimo para salir adelante”, dijo.