“No veo la hora de volver a montar en la bicicleta y con normalidad. Intentaré levantarme más fuerte”.
ÁLVARO HODEG
Ciclista colombiano del Deceuninck
Así dice el velocista tras sufrir una caída que dio por terminada su temporada. En un mes espera estar de nuevo sobre la bicicleta.
“No veo la hora de volver a montar en la bicicleta y con normalidad. Intentaré levantarme más fuerte”.
ÁLVARO HODEG
Ciclista colombiano del Deceuninck
Por JHEYNER A. DURANGO HURTADO
La caída que sufrió Álvaro Hodeg en días recientes durante el Tour de l’Eurométropole (Alemania) fue tan impactante que doña Elsa, su mamá, estuvo a punto de tomar un avión rumbo a Europa para saber, con certeza, las lesiones que presentaba el corredor.
Su propio hijo, vía telefónica desde el hospital y pese a tener fracturado el radio y la muñeca izquierdas, dos costillas, la escápula y el hombro derechos, fue quien la tranquilizó para que se quedara en Colombia, donde el ciclista llegó días después para iniciar la recuperación.
“No recuerdo nada de lo sucedido. Me dicen que estuve 30 minutos inconsciente. De hecho, así entré al hospital. Al despertar no sé por qué no sentía dolor. Recuerdo que les decía a mis entrenadores que si podía competir de nuevo a los dos días siguientes, pero en realidad no sabía que el golpe había sido tan delicado. Por fortuna no pasó a mayores”, expresó Hodeg, el deportista que, con paciencia, humildad y talento ha sabido ganarse el respeto en el pelotón mundial, tanto que él mismo se sorprende del deseo de otros equipos por hacerse a sus servicios.
En charla con EL COLOMBIANO, Hodeg, deseoso por volverse a montar en bici, habló del difícil momento que acaba de vivir, sobre su permanencia en el equipo Deceuninck-Quick Step y de sus expectativas para el próximo año.
Fue tan severo su accidente que hizo pensar lo peor. Hasta Nairo Quintana lo apoyó en redes y habló del riesgo y peligro que tiene este deporte...
“Claro, es que en cada sprint te juegas la vida, en ese instante la adrenalina va al límite. La verdad no me acuerdo de nada, estuve 30 minutos inconsciente. Me dicen que la caída fue fea. He visto la repetición varias veces para analizar en qué me equivoqué”.
¿Para volver a ver cuál fue su error?
“Sí, claro, la verdad llegué a esa carrera muy ansioso, quería ganar y me sentía demasiado bien para terminar de gran manera el año. Pero no sabía qué había pasado, si me tropecé contra algo, pero en sí tuve el error de coger la curva final rápido y por eso me fui contra la baranda. Solo queda el aprendizaje”.
Alguna vez contó que su mamá le pidió que no tenía necesidad de hacer ciclismo, pero se lo expresaba más por el miedo que le produce una caída, ¿qué le dijeron en casa?
“Fue un golpe doloroso para todos, y más porque nadie sabía en realidad cómo me encontraba de salud. Había tanta preocupación que mi mamá iba a coger un vuelo para Europa (risas). Ella me dice que no monte en bici, es porque cada mamá siempre quiere proteger a su hijo”.
¿Cómo los tranquilizó, sobre todo a ella?
“Les dije que así era el ciclismo, que uno nunca sabe cuándo se le pueden presentar estos obstáculos. Pero que tenía que volver a pararme porque esto es lo que me gusta. También que tuve suerte y que gracias a Dios las cosas no fueron más graves”.
Desde ya se le notan las ganas de retornar...
“Así es, pero debo tener precaución. Es que si bien había tenido golpes antes, esos no fueron tan fuertes como este. En un mes ya debo estar empezando a montar en bicicleta. No veo la hora, el ciclismo es mi trabajo. Las cosas vienen por algo, intentaré levantarme más fuerte”.
¿Cómo hace para mantener esa fortaleza?
“Gracias a Dios y a muchas personas, como familiares y las de mi equipo... En realidad no me esperaba tanto apoyo de la gente, y esto motiva a pararme para hacer las cosas mejor el próximo año”.
Hay gente que lo aprecia y también hay escuadras que quieren contar con sus servicios, ¿qué opina de ello, cambiará de elenco? Se especula que el Bora está interesado en usted...
“Yo leí esa noticia y quedé sorprendido porque no tenía conocimiento de esto, pero me genera alegría que, en tan poco tiempo que llevó en el ciclismo de Europa, haya tanta gente que lo quiere a uno, incluso los mismos corredores, porque si bien somos rivales en la carretera, fuera de ella hay amistad”.
Fue un sueño cumplido llegar a uno de los equipos que tiene parte de los mejores velocistas del mundo, pero ¿cómo logró consolidarse?
“Siempre he estado feliz de estar aquí, y esa es una de las claves. Decía que cuando me tocara trabajar para otro lo haría sin ningún reparo, y ahora me dan la oportunidad de ganar. Entonces es lindo saber que el equipo te apoya, que confía en ti y que está detrás esperando que uno logre cosas grandes”.
¿Fue complicado esperar su momento?
“Siempre tuve claro que no podía entrar al equipo creyendo que los demás compañeros iban a trabajar para mí. Con calma me fui ganando el espacio y el grupo ahora me respalda, lo cual ya es un triunfo”.
¿En 2020 cree que tenga la posibilidad de correr una gran vuelta?
“Creo que ya es hora. En la presente temporada se pensaba estar en la Vuelta a España pero al analizar el recorrido este no se adaptaba a mis condiciones y tomamos la decisión de no hacerla. Espero estar más maduro para lo que viene para poder hacer una grande, no sé cuál pero esa es la idea que estoy manejando. Vamos a ver cómo transcurre todo” n