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La participación de Colombia en el Suramericano femenino de fútbol de salón, categoría mayores, que se realizó en Tunja, resultó redonda: título general, trofeos individuales para Magaly Vergara como valla menos vencida y Marcela Restrepo, la goleadora con 12 tantos. Ahora su máximo reto será defender la corona mundial en Balaguer, Cataluña, del 19 al 25 de noviembre.
El 6-0 en la final tuvo sabor a revancha, pues las venezolanas habían superado a las dirigidas por Luis Mario González en tiempo extra en la pasada edición. Las patriotas venían de superar en Tunja por 5-4 a Brasil, tras remontar un 4-1.
Luego de celebrar con sus compañeras, la colombiana Nathalia Riveros señaló: “Hace dos años fue el tiempo de ellas, pero ahora las cosas fueron distintas, fue el tiempo de nosotras”.
Para el técnico González la consigna era muy clara: asegurar el partido desde el principio con mucho orden y tocando el balón para poder sacarles el último aire a las venezolanas.
La antioqueña Paula Botero aportó dos goles en el último duelo, al igual que Riveros y Restrepo. Esta última, al recibir el Botín de Oro como la máxima artillera del campeonato, también vivió su revancha personal: hace dos años sufrió una rotura de ligamento que le impidió jugar la final y la obligó a permanecer en recuperación cinco meses.
En la tercera posición del evento terminó Brasil, al vencer a Paraguay 5-1.