Hace menos de un año, María Camila Osorio se convirtió en la tenista más joven en darle un punto de Fed Cup a Colombia. Lo hizo ante la paraguaya Camila Giangreco, 6-4 y 6-3.
Allí empezó a figurar en el panorama nacional y a estampar su nombre entre las grandes promesas que tiene la raqueta criolla.
A partir de mañana, en México, vivirá su segunda experiencia de Fed Cup y quiere aportar su juego y su alegría para soñar con el Grupo Mundial. En charla con EL COLOMBIANO habló de sus anhelos.
El 2016 marca un punto de inflexión en su carrera, ¿qué balance hace de él?
“Fue un año muy bueno, porque se cumplieron las expectativas. Quería estar en el top-100 de la ITF y pues gracias a Dios se cumplió ese objetivo”.
Entonces, ¿qué reto se plantea para 2017?
“La meta es estar top-10 del ITF y jugar los grand slams júnior, ahora tengo el ranquin. Soy top-50 para jugar Roland Garros y Wimbledon. Dios quiera que se den las cosas”.
Solo suma 15 años, ¿siente presión al vestir la camiseta de Colombia?
“No siento ningún tipo de presión. Es una alegría y un honor poder representar a mi país, es lo que todo tenista desea, estoy muy orgullosa y feliz de tener esta oportunidad. No tengo nada que perder”.
¿A qué cree que puede llegar Colombia en este reto?
“Creo que todas deseamos poder clasificar al grupo mundial. Tenemos que ir poco a poco, de la mano de Dios, y deseamos hacer lo mejor allá”.
¿Qué significa tener a Catalina Castaño, de tanta experiencia, como capitana?
“Cata es una súper ayuda, imagínate que ella esté ahí con nosotras, nos pueda orientar, es algo que valoramos y es un honor que la tengamos como capitana y que nos pueda aportar. Ella nos ha enseñado tanto fuera como dentro de la cancha, entonces es muy valioso tenerla ahí”.
Acabó de conquistar un título en la parada del Mundial juvenil de Barranquilla, ¿qué aprendizajes le dejó esa experiencia?
“Muchos; soy una niña muy creyente, porque de la mano de Dios todo se puede, y que hay que estar muy ordenada y disciplinada, con trabajo todo se puede y gracias a Dios conseguí ese título”.
Cuando se está concentrado en un torneo tan importante, hay un buen tiempo “muerto”. ¿Qué hace María Camila en esos ratos?
“Veo Netflix. En las noches oro, leo la Biblia, escucho música y comparto con mis compañeras”.
¿Qué es lo que más disfruta?
“Me encanta bailar, escuchar música, estar con mi familia, compartir con la gente que quiero, todo eso. Soy una niña muy alegre”