Un equipo que genere 20 opciones claras de anotar en tres partidos, es protagonista y clasifique invicto a la segunda ronda de la Copa América no sólo se gana el respeto entre sus rivales, sino que evidencia que tiene más cosas buenas que malas y con qué continuar alcanzado su estilo.
Ese es el caso de la Selección de Colombia que, con un estratega de la vieja guardia capaz de adaptar un sistema para los jugadores modernos que posee, ratifica que su proceso está en crecimiento y va camino a recuperar esa identidad que muchos aplausos internacionales le generó también con Hernán Darío Bolillo Gómez en el cuerpo técnico.
La solidaridad que tan satisfecho tiene a Francisco Pacho Maturana, director de desarrollo deportivo de los combinados patrios, el orden que no se cansa de resaltar Bolillo y el trabajo en equipo que tiene orgulloso al capitán Mario Alberto Yepes son apenas algunas de las características especiales del tricolor nacional que se dio el privilegio de ser el primer clasificado para los cuartos de final del torneo continental.
"Colombia ilusiona, porque todos los jugadores son solidarios y están empeñados en progresar; sin embargo, hay que tener los pies en la tierra porque así como tenemos una maleta para largo tiempo, también la podemos desbaratar en cualquier momento para que nos alcance para menos días" fue una de las conclusiones de Pacho Maturana luego del triunfo claro 2-0 sobre Bolivia.
En su regreso a prácticas este lunes Hernán Gómez se mantuvo en que "le creo mucho a mis jugadores y admito que vamos a recuperar la identidad con jugadores más rápidos, con mucho orden y demasiada técnica; también resalto que el grupo asimiló que no vamos a jugar para un elemento determinado, sino para el plantel y eso nos lleva por buen camino".
Así como los llenó de flores, también se mantuvo, luego del 3-0 de los suplentes sobre la tercera del Unión de Santa Fe, que "nos falta continuidad en el juego y concentración, pero como estamos en construcción eso se conseguirá con el venir de los partidos y el trabajo, de ahí la importancia de continuar en la Copa América".
La Selección, que podría enfrentarse a Perú, Venezuela, Uruguay, Brasil o Paraguay en la segunda ronda el sábado a las 2:00 p.m. en Córdoba, también establece la diferencia en el torneo gracias a que práctica un fútbol de conjunto en el que todos piensan para el colectivo y el lucimiento individual lo dejan para después.
"Ese es uno de nuestros fuertes", recalcó Yepes. Completó su pensamiento diciendo que "acá sabemos hacia donde vamos pese a que venimos en crecimiento partido a partido, el grupo tiene deseos de salir adelante por Colombia y eso me tiene muy satisfecho y optimista para lo que sigue. Nosotros también vamos a ser difíciles para todos y eso es bueno que los rivales se preocupen por vos".
La claridad que tienen sus líderes es la que caracterizó a Colombia ante Costa Rica, Argentina y Bolivia. Y gracias a la mentalidad ofensiva y a la actitud positiva, que se le nota de lejos al plantel, el combinado patrio superó con creces la participación de la Copa América de Venezuela. En 2007 el balance de la primera fase fueron dos derrotas, una victoria, nueve tantos en contra, tres a favor, la eliminación y una triste imagen del fútbol nacional. Cuatro años después se clasifica de manera invicta e ilusionando con fútbol, planteamiento táctico y con la propuesta colectiva en Argentina-2011.
