El director de la Policía de Bogotá, general Rodolfo Palomino, reportó que tras la agresión de los hinchas de Millonarios al bus del Deportivo Cali, en el cual resultó herido el jugador Juan Guillermo Domínguez, las autoridades ampliaron su dispositivo de seguridad.
El jugador es atendido en la Clínica Palermo de Bogotá.
El bus del Cali fue agredido mientras ingresaba a las instalaciones del Estadio El Campín.
El coronel Contreras, encargado de la seguridad del estadio, reportó que hasta ahora la herida "no es de gravedad".
La agresión se presentó por hinchas del equipo anfitrión cuando le lanzaron una piedra al bus del equipo que cayó en uno de los ventanales centrales del automóvil.
Juan Carlos López, presidente de Millonarios, afirmó: “Les pedimos excusas a los jugadores del Cali, de algo que el club realmente no tiene nada que ver pero crea un traumatismo, esos actos de violencia hay que desterrarlos”.
Por su parte, el director de la Policía Metropolitana, general Rodolfo Palomino, anunció que entregarán una recompensa de 5 millones de pesos para quien entregue información de quien lanzó la piedra.
“Es un hecho que todos debemos repudiar, independientemente que seamos hinchas o no. Cómo es posible que cuando se da un partido de un campeonato interno hay este tipo de comportamiento, hay que hacerle un llamado muy firme a todos los aficionados para que un comportamiento como el de hoy no se repita y les pedimos que los aficionados no encubran al que lanzó esa piedra”, agregó el general Palomino.
También anunció que condujeron a 18 personas y de ellas 13 son menores de edad y cinco adultos “de los que esperaríamos y es un llamado a la afición a que sean solidarios con sus equipos y con el fútbol”, indicó el general Palomino.
Ante críticas del presidente del Cali, Rodrigo Otoya, sobre falta de seguridad de la Policía antes de arribar al estadio, el general Palomino dijo que sí tenían suficientes oficiales escoltando el bus vistante.
Ramón Jesurún, presidente de la Dimayor, señaló que estos hechos “no solo hacen daño a una institución, sino que ponen en riesgo la vida de un ser humano”.
"Hay que seguir trabajando arduamente para erradicar a estos vándalos, antisociales y asesinos, porque una piedra de estas pudo haber acabado con la vida de uno de los jugadores del Cali”, agregó Jesurún.
“La persona que agredió ojalá sea capturada y judicializada, esa persona no puede expresar los sentimientos del fútbol”, añadió.
El partido que estaba programado para las 5:30 p.m., fue suspendido hasta las 6:15 p.m.