Al comienzo de los cuadrangulares semifinales del Torneo Postobón II nadie pensó que al América de Cali se le iba a complicar tanto el panorama para conseguir el ascenso directo a primera división, pero hoy la situación es bien complicada.
Alianza Petrolera, que tiene el punto invisible en el Grupo B y que la semana pasada goleó 1-4 a los escarlatas ante su propia afición, está a un paso de jugar la final del certamen del segundo semestre, después de derrotar 0-1 al Bucaramanga como visitante.
La diferencia es de 6 puntos entre el cuadro que ahora juega en Guarne (Antioquia) y los diablos, que deberán ganarle este lunes a Universitario de Popayán en el Pascual Guerrero y el próximo domingo en el Ciro López, abrigando la esperanza de que el alicaído y ya eliminado Bucaramanga no se vaya en blanco y trate de hacerles resistencia a los ‘petroleros’.
Ese es el panorama, pero mientras haya opción matemática hay que jugar los partidos. América recupera para el partido ante los caucanos al lateral izquierdo Julio César Ortiz, mientras que Yámilson Rivera sería el reemplazo de Steven Mendoza, quien salió con un desgarre muscular en la pierna derecha y su incapacidad inicial es de tres semanas.
La plantilla roja sabe que hay que ir hasta el final y por la mente de los jugadores no pasa nada distinto a la victoria para seguir soñando con la escasa, pero igual posibilidad, de ir directamente a la final del torneo del segundo semestre.
Por los lados del visitante, la idea es apretar en el medio campo, pero al mismo tiempo estar pendiente de cualquier equivocación en la zaga de América, obligado a ganar para seguir con vida.
