Esta vez Colombia no fue superior al rival ni generó el fútbol y sí que menos las opciones que se necesitan para desequilibrar un partido y llevarse los puntos que tantas satisfacciones le producen al vencedor.
Una opción clara en 90 minutos, el pase de Carlos Bacca a Falcao, quien la estrelló en el horizontal a los 78’, nunca será suficiente para aspirar a una victoria frente a un rival que siempre genera problemas.
El nivel individual que llevó al grupo a ganar cuatro encuentro seguidos no fue alto y el equipo bajó un puesto en el torneo por la derrota 1-0 frente a Venezuela que se la montó a Colombia, ya que en esta Eliminatoria le sacó cuatro de seis puntos y de los últimos 18 le ha quitado 11.
José Pekerman reconoció anoche que "nos faltó efectividad y controlar la capacidad del adversario", pero omitió que David Ospina terminó siendo la figura ante la permisividad defensiva del grupo al no descifrar el fútbol práctico y la media distancia del contrario.
El pase final ayer no fue claro en el combinado patrio, los delanteros no fueron continuos en su apoyo a los atacantes y los encargados de generar el fútbol ofensivo abusaron de la conducción.
Por esas razones y el desacierto del entrenador en las variantes, olvidando que el tener demasiados delanteros no garantiza el éxito, Colombia sufrió su tercera derrota en el Premundial de Brasil-2014, la segunda en la era Pekerman.
Lo positivo de esto es que hay tiempo para replantear con miras a Argentina y a diferencia de las eliminatorias pasadas, este revés no diezma las posibilidades de la Selección, porque con sus 19 puntos es tercera y continúa con su ilusión mundialista intacta, ya que todavía tiene en juego 9 unidades en casa -y 9 por fuera- y con seis de ellas que consiga asegurará su clasificación.
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