Leobigildo Cunanpi Quiro, como gobernador indígena embera de Nuquí (Chocó), todos los días se levantaba temprano para ayudar a las 170 familias de su comunidad.
Dueño de los consejos sabios, de la palabra precisa, de las soluciones prácticas, dirigía y curaba a los hombres y mujeres emberas.
Sabía lo que le pertenecía a su gran familia, cuáles eran sus tierras, dónde no podía construir el colono ni excavar minas ni nada. El domingo pasado, después de una reunión con los otros mayores, llegaron tres hombres al resguardo y preguntaron por Leobigildo.
Esa mañana lo encontraron, le dispararon por la espalda y lo mataron. Fueron 39 años de vida, de toda una tradición milenaria acumulada, pasada de mano en mano, fulminada por tres disparos.
La asociación Orewa, que agremia a las comunidades indígenas de Chocó, denunció que al gobernador ya lo habían amenazado hombres sin identificar "por defender su territorio de los grupos armados y de las construcciones de los colonos", dice César Queragama.
Según Inteligencia Militar, en esta zona del pacífico hacen presencia las Farc, el Eln, "los Rastrojos" y "los Urabeños". Todos estos grupos se disputan este territorio, por donde entran armas y se envía la coca hacia Centroamérica en lanchas rápidas.
Cuatro emberas han sido asesinados en el Chocó, entre enero y septiembre de 2012, según la Organización Nacional Indígena de Colombia (Onic), que recientemente publicó el informe sobre la situación de derechos humanos de las etnias en el país.
El desplazamiento masivo
Las conclusiones del estudio de la Onic son preocupantes: hasta el 30 de septiembre, 78 nativos fueron asesinados: 26 nasas, 24 emberas, ocho awás, cinco salibas, cuatro wounaan, tres pastos, dos kankuamos, dos jiw, un inga, un misak, un makaguán y un hitnu.
También los 112 pueblos indígenas (clasificados en 80 etnias) padecen el desplazamiento forzado: 10.515 aborígenes han sido expulsados de sus resguardos. En el Chocó se presentaron 3.469 casos, y solo en el Cauca, entre julio y septiembre, se desplazaron 3.608 nasas.
Según Luis Fernando Arias , presidente de la Onic, llama la atención que los desplazamientos masivos se den como resultado de los combates entre el Ejército y las Farc.
En el informe de la Onic se identificó que 6.534 nativos fueron desplazados, presuntamente, después de 21 combates entre las Farc y el Ejército. En solo acciones militares se registraron 3.256 casos. Por responsabilidad de las Farc 350, por combates entre la guerrilla y las bacrim 200. Finalmente, por inseguridad alimentaria se registraron 51 casos y sin identificar 124.
El desplazamiento también amenaza a los embera de Nuquí. Una comisión de verificación de lo sucedido con Leobigildo Cunanpi Quiro, estará hoy en ese municipio.
Denunciarán nuevamente el asesinato del querido gobernador que se oponía a los atropellos de todos los actores armados.
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