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En Cauca hay una organización indígena que agremia unos 30 mil nativos que no siguen las directrices del Consejo Regional Indígena del Cauca (Cric), ni mucho menos de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (Acin). Ana Silvia Secué es la representante de la OPIC, Organización Pluricultural de Pueblos Indígenas de Colombia y en entrevista con este diario aseguró que las Farc tienen un acuerdo con los nativos para expulsar al Ejército y a la Policía de los territorios de los municipios del norte del Cauca, donde las autoridades sostienen intensos combates con los subversivos.
A las denuncias de Secué salió Feliciano Valencia, del Cric, quien las desmintió. A la medianoche de ayer venció el ultimátum de la Guardia Indígena para que las Fuerzas Militares, la Fuerza Pública y la guerrilla salieran de sus territorios. La Opic insistió en que el Cric y la Organización Nacional Indígena de Colombia (Onic) solo buscan favorecer su movimiento “revolucionario” y a las Farc.
¿Por qué afirma que la crisis en el Cauca, en parte, es culpa de las organizaciones indígenas?
“Lo que está pasando en el Cauca yo lo vengo denunciando hace mucho tiempo. Nos hemos dado cuenta que ellos nos dicen que luchemos por nosotros y eso es mentira. El Cric engaña a los indígenas. Descubrimos los acuerdos que tienen los cabildos, el Cric, la Onic y otras organizaciones con la guerrilla. Eso está firmado en unos acuerdos que dicen que ellos trabajan mutuamente y que velan por el proceso para sacar adelante los proyectos, que llaman agrarios en esa revolución. Entonces, yo empecé a denunciar esto en la Personería, en la Fiscalía, en la Presidencia y eso parece que no ha dado eco porque no ha pasado nada. Yo y otros líderes hicimos la denuncia. La Guardia Indígena del Cauca, así como está haciendo en Toribío, también nos está haciendo a nosotros. Nos está desplazando, nos está quitando parcelas, cultivos por el solo hecho de que nosotros no estamos de acuerdo”.
¿Qué opina sobre la expulsión del Ejército y la Policía de Toribío por parte de la Guardia Indígena?
“Si los indígenas cometen esos actos terroristas qué se espera de ellos. A los medios de comunicación les he pedido que nos hagan el favor y nos den la oportunidad de denunciar. Yo ya he dicho que no tengo por qué callarme porque mire todo lo que está pasando en Toribío, las tumbadas de las trincheras, la caída del avión, el incendio del helicóptero, las groserías que hicieron la gente contra el presidente Santos. Ellos se colocan en medio de los combates para que el Ejército no siga atacando a la guerrilla, ni la guerrilla siga atacando al Ejército. Ellos se presentan como víctimas y no son víctimas, sino que están de acuerdo en que se despejen los territorios y los cabildos para que siga el movimiento del narcotráfico y la narcoguerrilla”.
Ustedes aseguran que agremian a 30 mil indígenas, pero la Onic, máxima autoridad indígena del país, no los reconoce y el Cric desestima estas sus denuncias ¿por qué?
“La Onic nos discrimina y no quiere que existamos junto con las otras organizaciones departamentales. Nosotros no les caemos bien a ellos porque hablamos de la institucionalidad, que defendemos nuestro Estado y nuestra Constitución. Eso no les gusta a ellos porque están enseñados a la revolución y al terrorismo”.
¿Cuáles son las pruebas que tiene Ana Silvia Secué para decir que hay un acuerdo entre la Guardia Indígena y las Farc?
“Hay un acuerdo cuando vivía ‘Marulanda Vélez’, de 1987 en La Uribe, Meta, y el otro está firmado del 89. Y no solo eso. Me baso también para decir eso cuando el Cric y las otras organizaciones fueron organizadas por la guerrilla del M-19, por las Farc, el Eln, el Quintín Lame. Yo he vivido eso en mi propia casa. En el 2009 salió un comunicado de las Farc a la Acin, donde reconocen el acuerdo otra vez. Eso está en la Fiscalía”.
Pero hay una carta de ese mismo año del CRIC y de la Acin dirigida a “Alfonso Cano”, donde le piden a las Farc no infiltrar la Guardia Indígena y cesar los asesinatos y demás hechos violentos contra los nativos del Cauca...
“Esas son cartas para despistar a la comunidad civil, para despistar al Gobierno. Eso es lo que está pasando ahorita, que la institucionalidad no se de cuenta que los están ayudando cuando de verdad sí lo están haciendo. Ellos hacen dramatizados y se escudan en los famosos derechos y todas esas leyes que los amparan. Pero eso que le mandaron a ‘Cano’ no era por que de verdad lo sentían. Si de verdad lo sintieran los resguardos no estarían hoy como está Toribío”.
Usted dice que sabe que recientemente la Guardia Indígena hizo un acuerdo con las Farc para sacar al Ejército y a la Policía de la zona, ¿en qué sustenta esa afirmación?
“Desde que se ha constituido la autoridad indígena y se ha luchado por un proceso indígena siempre hablan de una resistencia, pero eso lo manejan otros. Ellos se han estado reuniendo seguido. Por ejemplo, a mí me llaman del mismo territorio, ‘por favor hagan algo ustedes, denuncien lo que está pasando’. Mucha gente nos ha dado la autorización. Muchos sabemos que eso es así y ahí fue que me di a la tarea de denunciar. Van acabar con la cultura de nosotros . Eso no nos beneficia para nada en los territorios. Hay hambre, por eso ahora están así, la misma plata del Gobierno que atacan se la comen. ¿Qué más esperamos?”.
¿Qué dice frente a quienes afirman que la OPIC se creó para desprestigiar a las comunidades indígenas y para dividir su movimiento?
“Eso fue lo primero que salió en 2009 en varios medios de comunicación cuando el Cric dijo que la OPIC es de Álvaro Uribe Vélez. Eso es mentira, yo al presidente Uribe, en los periodos que él estuvo, nunca pude ni siquiera darle la mano porque yo no salía de mi montaña. Yo era una indígena profesora, era de la escuela a la casa. Cómo iba hablar con el Presidente si eso es muy difícil. Eso lo dijeron para desprestigiarnos y para colocarnos como objetivo militar ante la guerrilla. Ellos decían que la OPIC era paramilitar y nos colocan de carnada a la guerrilla. Eso no es verdad. Nosotros nos organizamos para darle a conocer la verdad al Estado y para que el Estado nos ayudara a sacar adelante esa generación que va a quedar de indígenas”.
¿Quiénes son los líderes indígenas que según sus denuncias están haciendo acuerdos con las Farc?
“En ese documento que hemos leído hay unas firmas de líderes indígenas, como Anatolio Quirá, que ya murió. A mi modo hay otros, como Jorge Vives de Belalcázar, pero estamos en esas. Esa es la realidad que es verdad. Yo sé que esto es duro, como me dijo una delegada de la Defensoría del Pueblo regional, cuando denuncié a la Guardia Indígena que nos estaba quitando las parcelas. Ella me dijo que el problema éramos nosotros y yo le dije que no, que eso era un acto terrorista de la Guardia y yo le dije que no. Me dijo que aprendiera hablar, que ese no era el vocabulario para expresarme ante las autoridades indígenas. Entonces, me di a la tarea de denunciarlos y los denunciaré con nombre propio. Al que le quemen la casa, al que le asesinen el hijo, las parcelas y nos dañen las parcelas. Lo denunciaré todo”.