Llegó el día en el que el presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, piensa dar otro paso trascendental para consolidar su revolución. Este domingo la gran batalla se dará en las urnas donde más de 16 millones de venezolanos podrán elegir a sus representantes más cercanos y al mismo tiempo demostrar hasta dónde están dispuestos a aceptar el socialismo del siglo XXI.
Los analistas locales insisten ante la opinión pública en que no se trata de una elección cualquiera sino que está en juego mucho más.
Piensan que si el Presidente triunfa hundirá el acelerador para perpetuarse en el poder e implantar otros cambios que hasta ahora le han sido esquivos. Si, por el contrario, pierde algunos estados claves para ese proyecto, estará recibiendo un mensaje de que tiene hasta el 2012 para gobernar. No más allá.
Del total de gobernaciones que hay en disputa los opositores le han apostado fuerte a ganar aquellas donde el potencial electoral es mayor y de lograrlo estarían enviando un mensaje de fortaleza que hasta ahora no han tenido. De hecho llegan con candidatos de unidad para lograr sus nuevas conquistas.
El diario El Nacional se refiere a esos estados como el corredor electoral y serán claves dentro del futuro que le espera al país. Lo conforman los estados de Anzoátegui, Miranda, Carabobo, Aragua, Lara, Táchira y Zulia, así como la Gran Caracas.
No son de hecho los estados más grandes, pero si donde en conjunto se encuentra más del 60 por ciento de los votantes.
Según sondeos de varias encuestadoras y que en Venezuela en este momento no pueden hacerse públicos, Zulia, Táchira y Carabobo y en cierto grado Miranda los estaría ganando la oposición, mientras que Anzoátegui seguiría en poder del gobierno con la reelección del actual gobernador, Tarek William Saab. En Aragua y Lara las cosas aún no están claras sobre quiénes serían los ganadores, tampoco en Bolívar ni Sucre.
Pero no son los únicos estados en los que el gobierno tiene problemas. En Portuguesa, Trujillo, Guárico y Barinas, este último de dónde es oriundo el presidente y donde uno de sus hermanos, Adán Chávez, compite por la gobernación, pueden pasar a manos de antiguos chavistas que ahora son disidentes.
La pelea por Caracas
En el Distrito Metropolitano de Caracas es difícil que triunfe el opositor, Antonio Ledezma, a pesar de que la gran mayoría de los grupos adversos al gobierno lo respaldan, o al menos así lo indicaron sondeos recientes. No obstante, en los últimos días su respaldo iba en ascenso.
Sin embargo, en el municipio Sucre, que hace parte de la Gran Caracas y donde se encuentra el barrio más grande de Suramérica (Petare), el opositor, Carlos Ocariz, del partido Primero Justicia y candidato de la unidad, lleva la delantera en los sondeos y de obtener el triunfo sería un duro golpe para el gobierno.
El actual alcalde de ese municipio, José Vicente Rangel Avalos, hijo del ex vicepresidente José Vicente Rangel, ha sido muy criticado por su gestión y corrupción, incluso por los propios chavistas, lo que se convirtió en un problema para el aspirante a ese cargo Jesse Chacón, un ex ministro que cuenta con toda la confianza de Chávez.
En una charla con la prensa extranjera sobre esas posibilidades que tiene la oposición, el analista Luis Vicente León, dijo que si el gobierno pierde algunos de esos estados y municipios como Sucre en la Gran Caracas, el mito de que los pobres están con Chávez se puede derrumbar más.
En el otro municipio populoso de la Gran Caracas, El Libertador, se da por hecho que la victoria la obtenga quien fuera vicepresidente de la República y presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) Jorge Rodríguez. Su principal contendor es el ex líder estudiantil Stalin González, que es visto, incluso por los opositores, demasiado joven e inexperto para ese reto.
Es por eso, que los días que antecedieron el cierre de campaña, el presidente Chávez no descansó y se le vio muy activo en visitas por esos estados y localidades para respaldar a sus candidatos.
Pero si en esos estados los candidatos del Presidente tienen inconvenientes, los encuestadores a los que se les relaciona de cierta manera con el chavismo, como Germán Campo de la firma 3011, creen que la oposición solamente tiene segura la gobernación de Nueva Esparta y que en el resto, incluso el Zulia, fortín opositor, la batalla es fuerte.
El estado Zulia es la joya
De hecho hay quienes consideran que uno de los objetivos del presidente Chávez es ganar el estado de Zulia, con lo cual estaría dando pasos muy fuertes para fortalecer su proyecto. "No le importaría perder alguna o algunas de las otras gobernaciones si gana el Zulia", dijo un político cercano al gobierno.
Se trata de un estado desde el cual, según miembros del gobierno, se han movido los hilos para desestabilizar el país y donde además se encuentran grandes reservas de petróleo, lo que le da una importancia trascendental a quien logre obtener el triunfo.
El profesor Rafael Muñoz de economía de la Universidad Católica Andrés Bello, dijo que no cree que el gobierno o la oposición se vayan a llevar una victoria contundente y que los resultados serán parejos, lo que le daría cierta ventaja a la oposición, que en estos momento tiene poco.
"Con las gobernaciones o alcaldías que llegue a ganar, la oposición estará logrando, por primera vez en mucho tiempo, la conformación de líderes electos. Sin duda, esto los fortalecerá", explicó.
Por su parte, el analista Eduardo Semtei, no tiene duda de que si la oposición no logra anexar varios estados importantes para fortalecerse, Chávez buscará de nuevo su reelección, aunque cree que entre opositores y disidentes pueden conseguir entre ocho y diez estados, lo que será un obstáculo para el mandatario en su objetivo de quedarse en Miraflores.
Para este analista una de las causas que llevarían al gobierno a perder el poder en varios estados se originó cuando sus candidatos fueron nombrados por el propio Presidente, aunque se hable de unas elecciones de base en el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Según el profesor y analista local José Vicente Carrasquero, una derrota en algunos de los estados claves para el gobierno en las elecciones de hoy estarían enviando un mensaje para las próximas elecciones de diputados en la Asamblea Nacional en el 2010, que según su opinión estaría más equilibrada.
Los ciudadanos venezolanos tienen la última palabra y será en los puestos de votación donde la darán a conocer. Nunca antes una elección regional fue tan importante para un proyecto nacional.
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6