Este domingo a la una de la madrugada, en un aparatoso accidente entre un vehículo particular y un carro de escalera, murieron los futbolistas Hermán Córdoba y Mario Beltrán, del Club Deportivo Atlético Huila y una mujer que los acompañaba que fue identificada como María Helena Cruz Otero.
El director de la Policía de Carreteras, general Rodolfo Palomino López, dijo que los futbolistas iban acompañados de una mujer que resultó herida y minutos después falleció.
Por su parte, el futbolista Juan Camilo Restrepo López es el único sobreviviente del accidente de tránsito y quien fue trasladado a un centro médico asistencial de Neiva, en Huila.
"Lamentablemente (los hechos sucedieron) cuando (Hermán Córdoba) regresaba de Rivera a Huila luego de haber departido con algunos compañeros y una amiga. El vehículo Aveo, en el que se movilizaba, invadió el carril contrario chocando de frente contra una buseta, produciéndose la incineración de ambos vehículos", sostuvo el general Palomino.
El oficial aseguró que los vehículos involucrados en el incidente iban a gran velocidad y por eso al chocar de inmediato se produjo el incendio de los automotores.
El futbolista dejó una hija de escasos ocho meses quien se encuentra en Madrid, España, con la ex compañera sentimental del jugador del Club Deportivo Atlético Huila.
En cuanto a Maria Helena Cruz Otero, mujer que murió minutos más tarde en un centro asistencial de Neiva, es una amiga de Hernán Córdoba quien lo acompañó en su automóvil luego de salir de un balneario junto con otros tres futbolistas.
Lamentable hecho
El presidente del conjunto opita, Jorge Fernando Perdomo; el técnico Guillermo Teacher Berrío y jugadores del plantel se desplazaron al municipio donde ocurrió la tragedia.
Iván Champeta Velásquez, indicó que "desde todo punto de vista es trágico para nosotros, para la familia, para el fútbol colombiano, es triste, trágico. Estoy sin palabras… un muchacho que empieza a vivir y por Dios santo, no hay explicación".
Perdomo sostuvo que está "muy consternado, muy dolido", y el técnico Berrío, muy acongojado, afirmó: "Uno hablaba con ellos siempre, aconsejándolos, porque el fútbol es una pasión, a la gente de pronto con mesura".