Con la ayuda de científicos de la Nasa y militares estadounidenses del Pentágono, este martes se pone a prueba un nuevo avión cuyo motor podría revolucionar la industria de los misiles convencionales.
El avión denominado X-51A WaveRider, que tuvo un costo de unos 140 millones de dólares, deberá alcanzar una velocidad de 7.200 kilómetros por hora, con lo cual aumentaría en casi cinco veces la velocidad de la nave comercial más rápida del mundo hasta la fecha: el desaparecido Concorde.
El aparato posee un estatorreactor de combustión supersónica (en inglés, scramjet).
Experimento
La nave se elevará en el ala de un bombardero B52 hasta llegar a los 50 mil pies de altura, allí será liberada y empezará su único vuelo que durará cerca de 300 segundos antes de caer en el Océano Pacífico.
Durante ese breve tiempo se esperá que el X-51A WaveRider alcance la velocidad de 6 mach, es decir seis veces más rápido que el sonido.
Las pruebas son hechas con objetivos militares, pero este experimento podría revolucionar en un futuro la industria de los vuelos y su utilización en viajes comerciales podría acortar el tiempo de recorrido entre Londres y Nueva York en una hora.