Este martes, 2 de septiembre, se cumplen 25 años del atentando que sufrió la sede en Bogotá del periódico El Espectador.
Un camión instalado con 60 kilos de dinamita destruyó gran parte de las instalaciones del diario; sin embargo, al día siguiente el periódico logró salir a circulación con el titular: ¡Seguimos adelante!
El dos de septiembre de 1989 la detonación de este artefacto, atribuido al capo del cartel de Medellín,Pablo Escobar Gaviria, no causó víctimas mortales, pero sí 73 heridos y serios destrozos al alrededor de las instalaciones del diario.
El periódico siempre investigó e informó sobre los negocios ilícitos de Pablo Escobar y todo lo relacionado con el cartel de Medellín, lo que conllevó a que esa organización narcotraficante cometiera este atentado criminal contra la libertad de prensa.
A pesar del gran impacto de la bomba, la rotativa no sufrió ningún daño y al lado de los escombros el personal de publicidad continuaba laborando en precarias circunstancias.
Luego que el personal de socorro hiciera una ligera limpieza de escombros, los periodistas se sentaron a trabajar, en una sala de redacción improvisada, en la edición del día siguiente, logrando que al día siguiente el diario circulara normalmente con el titular en primera página diciendo: ¡Seguimos adelante!
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