Estados Unidos ha reducido a la mitad el número de militares que tiene destacados en Colombia y continuará con esta tendencia, aseguró en una entrevista el embajador estadounidense en Bogotá, William Brownfield.
"Hace dos o tres años (el número de la tropa estadounidense) llegó a su punto máximo, unos 500 militares", dijo Brownfield en declaraciones que publicó este domingo el diario El País, de Cali.
"En este momento estamos más o menos a la mitad y cada año bajará más" la cifra de unidades de las Fuerzas Militares estadounidenses en Colombia, agregó el diplomático.
Brownfield precisó la evolución del pie de fuerza de E.U. en este país al referirse al asunto de la inmunidad de estadounidenses en Colombia, que es uno de los más polémicos en las actuales negociaciones de un acuerdo para facilitar el acceso militar del primero a bases del segundo.
Washington gestiona con Colombia una alternativa al cierre de su base en Manta, en Ecuador, por decisión del presidente de ese país, Rafael Correa, que no renovó el contrato para el establecimiento de esta unidad firmado hace diez años.
El proyecto de acuerdo que está en discusión garantiza la inmunidad del personal civil y militar de Estados Unidos en Colombia, como sucede con los funcionarios de ese país asignados a tareas del Plan Colombia (contra las drogas y los grupos armados ilegales).
El menor número de estadounidenses en Colombia "me dice que la posibilidad de incidentes va a reducirse, porque tendremos menos personas que producen incidentes", sostuvo Brownfield.
En la entrevista, el embajador reiteró que su país no pretende establecer una base en Colombia, sino obtener de este país un acceso a bases locales, incluidas navales.
El acceso, dijo luego, no es nuevo por cuanto Estados Unidos tiene designados "representantes (...) en varias bases (de la nación andina) colaborando con las Fuerzas Armadas y la Fuerza Pública de Colombia en el combate contra la droga ilícita. Estamos hablando de cómo continuar y profundizar esa colaboración".
Brownfield aludió al temor de algunos sectores en el país y el exterior sobre posibles efectos adversos sobre las relaciones de Colombia con vecinos como Ecuador y Venezuela.
La de Estados Unidos es una cooperación con alcance "exclusivamente para Colombia y no debería afectar la relación con los países vecinos ni con un tercer país, sino al contrario, porque en la medida en que Colombia acabe con el narcotráfico y el terrorismo se va a beneficiar a la región", agregó Brownfield.