La Corte Suprema de Justicia llamó nuevamente a juicio al exsenador Miguel de la Espriella, condenado por sus vínculos con paramilitares tras haber firmado el denominado Pacto de Ralito, por su presunta responsabilidad del delito de constreñimiento al elector.
Según el alto tribunal, el exsenador De la Espriella no solo se habría comprometido a apoyar el proyecto paramilitar frente al Congreso, sino que también se habría aliado con estos grupos para inclinar la votación de los departamentos de Córdoba y Sucre a su favor.
Esta nueva investigación se abre tras el conocimiento unos nuevos documentos, en los que se evidencia que el exparlamentario habría llegado a un acuerdo con Salvatore Mancuso, para que las Autodefensas apoyaran su campaña en la regiones que tenían controladas. Esto soportado con las altas votaciones obtenidas por él en estos departamentos hacen suponer que sí hubo presión armada por parte del grupo ilegal para que la gente votara por el exsenador.
De la Espriella, que había renunciado a su curul como congresista con el fin de no ser investigado por la Corte Suprema, no podrá evadir este llamado nuevamente dado que el delito imputado es por un acto realizado en el marco de su servicio en el Senado, y una nueva jurisprudencia permite a la Corte llevar el caso, siempre y cuando sea conexo al hecho por el que ya fue condenado.
La primera audiencia de este juicio se realizará el próximo 9 de abril, donde se le acusará formalmente por los delitos imputados.
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