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"El guevarismo terminó en un icono"

14 de junio de 2008
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Una estatua de bronce y un parque que llevará su nombre en Rosario (Argentina), su ciudad natal; decenas de conversatorios y conferencias, cientos de actos por todo el mundo y la exaltación de uno de los revolucionarios más famosos de la historia fueron el hilo conductor de un sábado dedicado sólo al Che.

Ernesto Guevara, el Che, un argentino que con 81 hombres más tumbó una dictadura en Cuba. El que viajó por toda América entregando sus servicios médicos, luchando contra lo que él llamaba "imperialismo" y el que murió en las selvas bolivianas, dicen que asesinado por la CIA, cumplió ayer 80 años.

Ocho décadas que sus amigos de infancia y compañeros de viaje, Alberto Granado (quien vive en Cuba), y Carlos "Calica Ferrer, recordaron durante toda esta semana en incontables actos a lo largo y ancho de Argentina.

En entrevista con EL COLOMBIANO, "Calica", recrea algunos momentos que vivió junto al líder de izquierda, su gran su amigo, y al que hasta hoy no para de rendirle homenaje. "Calica" no deja morir las expresiones de cariño y la admiración hacia el ciudadano ilustre de Rosario, que nació el 14 de junio de 1928 y murió el 9 de octubre de 1967.

"Calica", ¿Qué queda del Che en la actualidad, más allá de fotos, estatuas, camisetas...?
"De la mercadería el Che no tiene nada que ver ni su familia ni nadie. Ha pasado a ser algo con lo que la gente negocia y saca plata. Pero lo de la imagen del Che es más porque es una persona amada y querida..."

Cuando usted viajaba en moto con Ernesto Guevara, ¿ya lo veía como el Che o no?
"El primer viaje de él fue en una bicicleta con motor, por el norte de Argentina. El segundo fue con Alberto Granado, como se vio en la película Diarios de motocicleta... Cuando él se graduó de médico en Buenos Aires, hizo el último viaje, que fue en el que yo lo acompañé. Ernesto terminó en México, conociendo a Fidel y embarcándose en el Granma. Ahí es cuando se transforma en el Che".

¿Por qué en ese tercer viaje con usted, el Che no pasa por Colombia? ¿Tuvo algo que ver que durante esos años estaba la dictadura de Rojas Pinilla?
"No. Yo pasé por Colombia pero el no. En Guayaquil nos separamos. El destino del viaje era Caracas, por lo cual teníamos que pasar por Colombia, país que Ernesto ya conocía desde el segundo viaje. Lo que pasó fue que, estando en Guayaquil, se presentó la oportunidad de ir a Guatemala por ser el primer gobierno socialista del general Jacobo Arbenz y cambiamos de idea. Sé que por el asunto del paso del Tapón del Darién, la posibilidad era viajar en un barquito hasta Panamá. Pero no hubo ningún otro motivo, sino hubiéramos pasado por allí, porque queríamos ir a visitar a Granado, quien ya estaba en Caracas desde el segundo viaje del Che".

De todos los libros, películas, biografías, incluyendo la suya "De Ernesto al Che" que han escrito del Che Guevara ¿Cuál es la mayor mentira que han dicho de él?
"La más grande es la que ha querido hacer con mucho interés cierto sector del imperialismo, y es la de hacer creer que Fidel Castro lo dejó sólo en Bolivia".

Pero eso es lo que sostienen la mayoría de historiadores...
"Esa es la mayor infamia que se ha dicho y escrito sobre él. Es más, por ahí hay otra nueva que salió y que muestra a Ernesto y a Granado montados en una motocicleta viajando por Bolivia. Tan es mentira, que ahora que me reencontré con Alberto, me dijo que él ni siquiera conoce Bolivia. Ahora aparece una moto del Che que viaja por todo el mundo y eso es falso. Lo único que falta es que la moto cruce el Amazonas, que cruce la selva..."

Algunos incluso llegaron a decir que el Che era homofóbico.
"No, no, no. Para nada. Ernesto  era un hombre de una mente muy amplia. Eso es una infamia. Él era muy respetuoso de todo".

Entonces, ¿cuál es la mejor biografía que existe del Che?
"La mejor biografía del Che no se ha escrito, como lo dijo Orlando Borrego (su segundo al mando en el Ministerio de Industria y Comercio de Cuba). Hay muchas y muy buenas, que han hecho investigaciones serias, que tienen datos reales y verídicos. Yo he escrito y muchos también, pero la mejor, sin duda, no se ha hecho".

Podemos decir que hay dos Ernesto Guevara: el de después de 1955 en Guatemala cuando se declara abiertamente comunista, o desde antes ya había decidido su inclinación política...
"El Che es fruto de muchas circunstancias... Yo creo que más versada en Marx era su primera mujer (Hilda Gadea). Influyó mucho su afecto y amistad con Fidel Castro... Es decir, Ernesto se va transformando, no es que el haya nacido como el Che..."

Pero usted, "Calica", el amigo de la infancia, compañero de recorridos y símbolo viviente de Ernesto Guevara, ¿veía desde su juventud que el Che iba tirando hacia la izquierda?
"Vea, le voy a contar un pequeño detalle. Nuestras familias, tanto la Guevara como la Ferrer, ya eran gente de ideas socialistas. Cuando la guerra civil española, nuestras familias ayudaron mucho a la gente que venía asilada de la República. Esta era materia corriente en nuestras casas y esa es la cepa política. También, la universidad influyó en él... el mismo Alberto Granado".

Es curioso que en medio de esas transformaciones políticas e ideológicas del Che, terminara sintiendo algo de afinidad por Juan Domingo Perón...
"Sí. Sabe lo que pasa... es que nosotros cuando nos fuimos de Argentina no éramos peronistas, pero hay un movimiento innegable de Perón sobre la aplicación práctica de la justicia social. Ernesto era un hombre inteligente que fue evolucionando... A mí no me consta, pero dicen que él se entrevista con Perón en Madrid, cosa que no puedo atestiguar, pero que la he leído".

¿Sí hubiera resultado un movimiento revolucionario en Argentina como el Che lo pensó?
"De haber resultado hay que saber que para ello tenía que contar con el apoyo del Partido Justicialista (de Perón)".

¿El guevarismo en el mundo está vivo o es más una fiebre?
"Tiene alma. Lo que yo puedo decir como amigo de él, por las charlas que doy, los países que he visitado, por los requerimientos que me hacen para contar mi experiencia, puedo decir que tiene mucha alma y, sobretodo, dentro de los jóvenes... Jóvenes que honestamente me dicen 'vea yo no se mucho, pero quisiera conocer más'... Es muy grande la devoción que se siente por él y ser amigo del Che es un pasaporte fantástico, casi diplomático".

Y en la práctica ¿qué queda del guevarismo?
"No existe tal cosa del guevarismo. Hay una admiración por el Che. Existen muchos partidos de izquierda que enarbolan la bandera del Che y que a lo mejor no coinciden entre ellos".

Ahí es cuando el Che se convierte sólo en una bandera y sólo en un icono.
"Sí, es exactamente una bandera. Una bandera del pedido de justicia, de un mundo de mejor, una lucha por los desamparados... Si eso es lo que usted quiere llamar como guevarismo, pues entonces eso es".

Cuando triunfó la Revolución Cubana, el Che ayudó a fundar la agencia Prensa Latina y algunos lo ven como adalid de la libertad de prensa, pero también cerró muchos medios de comunicación en la isla...
"El facilitó todo lo que pudo cuando estaba en Sierra Maestra. Le encantaba escribir, era un gusto enorme para él. Ernesto se quitaba horas de sueño para enseñarle a leer y a escribir a los soldados jóvenes y analfabetos. El analfabetismo se erradico totalmente de Cuba, en parte por lo que hizo Ernesto".

"Calica", ¿cómo se imagina al Che si hoy estuviera vivo?
"Yo no puedo asumir esa responsabilidad, no me gusta el futurismo ni especular sobre qué habría pasado si no lo hubieran matado en Bolivia. Seguro estaría como un líder de la Revolución Cubana al lado de Fidel".

¿Cómo encontró a su amigo Alberto Granado, quien viajó de Cuba para unirse a las conmemoraciones?
"Lo vi fantástico. El único problema es que tiene dificultades para caminar, pero su mente está perfecta. Esto lo noté cuando nos quedamos solos por ahí, tomándonos unos roncitos y contando anécdotas, que no podemos decir por miedo a que se malinterpreten".

Cuénteme así sea una de esas cosas, que yo no las malinterpreto.
"No... Eran más que todo sobre conquistas femeninas y ese tipo de anécdotas... El Che, entre lo listo, era un tipo muy buen mozo".

Eso quiere decir que tenía muchas conquistas, para no malinterpretar...
"... (risas) tenía lo que le representaba, porque era un tipo muy entrador, muy conversador  y simpático".

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