El papa Benedicto XVI aceptó la renuncia a la jerarquía de obispo del presidente electo paraguayo Fernando Lugo, dejándolo a partir de este miércoles en condición de laico, anunció monseñor Orlando Antonini, nuncio apostólico del Vaticano.
El nuncio dijo que incluso Lugo "fue liberado del voto de castidad; es decir, como cualquier otro laico, si quisiera puede contraer matrimonio de acuerdo con la ley civil".
"Entregué personalmente a Lugo hoy (miércoles) la carta del Santo Padre en la que acepta su renuncia, aclarándole que la dispensa es perpetua; ya no podrá retornar a su anterior condición de clérigo", acotó.
Lugo, de 57 años de edad, ganó las elecciones presidenciales del 20 de abril como candidato de la coalición opositora Alianza Patriótica para el Cambio (APC), derrotando al todavía oficialista Partido Colorado con 61 años en el poder.
Había presentado su renuncia al cargo de obispo el 25 de diciembre de 2006.
El 15 de agosto próximo asumirá el mando constitucional.
Monseñor Antonini explicó que "para la iglesia es un gran dolor la pérdida de un obispo, un sacerdote al que quisimos disuadir de su opción por la actividad política hasta el último día de su campaña electoral, pero el Santo Padre reconoció que fue elegido por la mayoría del pueblo para que dirigiera al Paraguay en los próximos cinco años".