"Emoción y alegría al recibir esos buenos deseos y esa linda energía cuando me escriben". Así les agradeció -en su cuenta de Twitter- James Rodríguez a sus amigos y fans que lo felicitaron ayer por su cumpleaños número 23.
El 10 de la Selección Colombia, quien pelea el título de goleador del Mundial de Brasil-2014 y quien nació el mismo día que el poeta Pablo Neruda, la pasó en su apartamento de El Poblado, buena parte del día, al lado de su esposa Daniela Ospina y su hija Salomé.
Según su suegra Lucía Ramírez, el talentoso deportista, declarado el Mejor Jugador de la Liga de Francia en 2014, aprovechó su estadía en Medellín para disfrutar después con los suyos en una reunión privada de la cual también hicieron parte su madre Pilar Rubio y su hermana Juana Valentina Rodríguez.
James, quien hace poco publicó que "cuando estamos juntos nos volvemos anormales… mi hermosa familia", también compartió con su cuñado David Ospina, algunos amigos especiales y recibió la felicitación de su padre Wilson James y los demás allegados.
El clasificado en el puesto 15 de los fichajes más costosos, según la Federación de Historia y Estadística, y Mejor Jugador de la fase de grupos de Brasil-2014, tuvo un día bien especial, ya que hacía rato no le tocaba celebrar su cumpleaños en territorio colombiano, pues antes lo hizo en Argentina y Portugal.
Terminados los festejos por sus 23 julios y la destacada actuación de Colombia en el Mundial, James Rodríguez se prepara para retornar al Mónaco de Francia, aunque admitió que "jugar en el Real Madrid es el sueño de mi vida".
Y todo apunta que el elenco merengue sí pagaría más de 102 millones de dólares por los derechos deportivos del 10 colombiano, uno de los diez mejores del Mundial.
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