Solo recuerda haberse disfrazado una vez. Y lo hizo de gladiador. Sin embargo, nunca dejó de salir a recorrer las calles de su natal Necoclí, o más tarde de Apartadó, para pedir dulces, así fuera a pie descalzo y sin ningún trapo diferente al de la ropa normal de niño.
Jamás dejó de hacerlo acompañado por sus amigos de cuadra, en patota. Por eso, hoy Juan Guillermo Cuadrado recuerda con nostalgia pero a la vez con satisfacción esa época en que fue un niño de esos que celebraban el Día de los brujitos como fuera.
Esa misma fortuna no tuvo su amigo y compañero William Francisco Álex Arboleda, a quien sus padres no lo dejaban salir de casa a pedir dulces. Era una época dura, violenta, la que vivía su Buenaventura natal. De ahí que no se le permitía salir a hacer el recorrido por las calles de la ciudad.
Menos mal, cuenta, por lo menos sí le llevaban los paquetes de confites para que se untara un poco de la tradición que hace más especial la existencia de los niños por estos días.
Los años pasaron y ambos dejaron de ser niños para convertirse en jóvenes con otra carga emocional, personal y profesional muy distinta que, no obstante, no les impide sentir como lo que somos todos: niños.
Una fiesta de disfraces
William ya tiene 20 años. Álex llegó a 18, mas no olvidan esos años idos. Y los recuerdan con gracia.
Precisamente EL COLOMBIANO los reunió para eso, máxime hoy cuando esperan que en las graderías del estadio Atanasio Girardot aparezcan juntos Supermán y el Conde Drácula, el Príncipe Caspian y Mortice, Winnie Pooh y los Power Rangers, o Blanca Nieves y los siete enanitos al lado de uno que otro lobo feroz.
Y no es que en el estadio se vaya a realizar un programa de tiras cómicas. Lo que acontece es que allí Independiente Medellín les brindará un homenaje a los niños en el mes de los brujitos, premiando con la entrada gratis a los menores de 10 años que lleguen disfrazados o con un antifaz que le cambie el decorado al escenario, donde William y Álex y el resto de jugadores del DIM, serán protagonistas de una fiesta contagiosa para cerrar la fecha 15 de la Copa Mustang II, en el juego ante el Deportes Quindío.
"Vaya sensación tan agradable produce llevar esta peluca de colores, me la va a regalar para chacotear en el equipo", fue la expresión de Arboleda cuando el viernes cambió la rutina del entrenamiento rojo poniéndose, por primera vez en su vida, un atuendo que transformaba de manera transitoria su rostro.
"Te queda muy bien, dejá la bobada que esto lo vivimos todos y sin mentirte se pasa fantástico, pues hasta los grandes salen en patota a pedir dulces", le dijo Cuadrado, "muerto" de la risa, mientras adornaba su cabeza con otra peluca semejante que les causó curiosidad y gran hilaridad a sus compañeros.
La victoria es el premio
Ese rato tan distinto al que se pasa antes y después de las prácticas, los motivó tanto que Cuadrado les pidió a los padres de familia "llevar a sus hijos para que nos motiven con esos disfraces que nos recuerdan la infancia. A mí me generaban muchas emociones. Por eso, qué mejor premio que tener una buena actuación ante el Quindío".
Y aunque por ahora no está en sus planes tener hijos, Álex está seguro que cuando eso ocurra "de seguro que los disfrazaré y saldré a pedir dulces porque eso es algo bonito que se puede disfrutar en familia y sirve para recordar el pasado".
De fútbol se olvidaron por un rato. Y justo cuando terminó la sesión de fotografía y las pelucas fueron a reposar en sus maletines, regresaron a la realidad de su trabajo, más motivados que nunca para encarar este partido de hoy.
Lo que sí no se les olvidó fue la charla del profesor Santiago Escobar y el énfasis que hizo sobre la continuidad de ese fútbol que trae el DIM y que se necesita no solo para permanecer entre los ocho mejores del torneo, sino también para rendirles un homenaje a los niños, esos que serán los hinchas del futuro del conjunto escarlata y que hoy son los llamados a disfrazarse mientras en la cancha, los que jueguen, harán todo lo posible para regalarles más que confites, una dulce victoria.
Pico y Placa Medellín
viernes
3 y 4
3 y 4
