¿Siente que a su vida le falta algo nuevo que la dinamice pero ignora en qué consiste esa estimulante novedad?. Una cuestión que puede resolverse con la ayuda de la creatividad, ese talento que todos poseemos, pero que a menudo tenemos aletargado por falta de entrenamiento y que se define como la facultad o capacidad de crear ideas, obras o situaciones nuevas y singulares.
Habitualmente, se afirma que la creatividad es hija de la experimentación, del talento y de la espontaneidad, y que para ser una persona creativa también hace falta, según los expertos, una buena dosis de osadía, de innovación y de apertura mental.
Todo ello puede inducir a pensar que la creatividad es un don extraordinario solo reservado a los grandes personajes, superdotados o genios, y que el resto de la gente debe conformarse con seguir el camino trazado por otros.
Llevadas por esta falsa creencia o persuadidas por otras ideas erróneas, arraigadas en una cultura popular que privilegia lo seguro, conocido y esquemático, muchas personas ni siquiera intentan desarrollar su lado creativo. No obstante, todos podemos ser creativos si nos lo proponemos.
Según el psicólogo argentino Abel Cortese, uno de los mayores expertos latinoamericanos en inteligencia emocional y aplicación de la creatividad para mejorar la vida y resolver conflictos, “cada una de las facetas de nuestra realidad (trabajo, amistad, amor, espíritu) se enriquecerá si le damos un toque creativo y de buen humor”.
Crear
Coincide Cortese con Alex Osborn, el publicista que inventó la técnica de la tormenta de ideas para estimular el pensamiento creativo, en que “todo el mundo posee cierta capacidad creativa, pero la mayoría de la gente no ha aprendido a utilizarla”.
“Una persona creativa es capaz de demostrar mayor originalidad que otras. En este contexto, la originalidad consiste en la aptitud para dar respuestas insólitas a las preguntas, o soluciones atípicas a problemas específicos”, según este experto, que propone una serie de ejercicios prácticos para conseguir ser más original.
El psicólogo argentino propone “mirar con nuevos ojos las cosas que son cotidianas y viceversa. Por ejemplo, imagine que es un ser extraterrestre que nunca ha visto un plátano y se encuentra una de estas frutas partida por la mitad. ¿Cómo la describiría? Después, piense en una actividad singular como levitar, y descríbala como si la llevara a cabo todos los días”.
Según expone Cortese, en la revista especializada Psicología Práctica, no hay que desechar ninguna idea por errónea que parezca, porque “a veces una idea o sugerencia insólita puede ser más valiosa que otra aceptada. Es mejor producir muchas ideas, aunque algunas sean equivocadas, que no decir nada nuevo”.
En el buen camino
“Si se divierte y se siente bien es que va por el buen camino”, dice Cortese, quien sostiene que esta teoría ha sido reforzada recientemente por la evidencia científica, aportada por una investigación de psicólogos de la Universidad del Oeste de Ontario (Canadá), según la cual quienes buscan la inspiración creativa deben intentar ver el lado amable de la vida.
Los investigadores canadienses utilizaron videos y música felices o tristes para crear distintos estados de ánimo en un grupo de personas y comprobaron que aquellas que tenían un estado de ánimo alegre tuvieron una actividad mental más creativa y abierta a aprender y desarrollar nuevos modelos de pensamiento, que aquellas con estados de ánimo afligidos o neutrales.
“Si tiene un proyecto sobre el que desea pensar de forma innovadora o tiene un problema que debe sopesar con cuidado, estar en un estado de ánimo positivo puede ayudarle a lograrlo”, ha señalado uno de los autores del trabajo, el estudiante de postgrado Ruby Nadler, de la Universidad del Oeste de Ontario.
Nadler y sus compañeros de equipo, que creen “que la gente intenta inconscientemente ponerse en un estado de ánimo positivo”, emplearon en su estudio una pieza muy animada de Mozart y el video de un bebé que reía, para inducir un ánimo positivo en los participantes, pero cada persona puede recurrir a sus músicas e imágenes alegres preferidas y más estimulantes para levantarse el ánimo a si misma, y ser más creativa.