La periodista Karen Gamba, quien ha estado este miércoles en el ojo de la polémica porque supuestamente jugó una "broma pesada" al comandante operativo número uno de la Policía de Bogotá, coronel Diego Hernández, negó la acusación.
Karen Gamba afirmó que ella y el coronel Hernández son amigos y que a través del PIN de su celular lo que le indicó era que estaba asustada porque las placas del carro no correspondía con la tarjeta de identificación que llevan los vehículos de servicio público en la capital del país.
Reveló que cuando llegó un gran número de oficiales a su residencia fue la más sorprendida y aclaró que ella no es tan irresponsable como para hacer una inocentada a un coronel de la Policía, ya que cuando le habló por el chat lo hizo como amiga y no como periodista.
Karen contó a los medios que hoy ha tenido su Twitter y Facebook colapsados por la cantidad de mensajes, muchos de ellos insultantes.
Versiones encontradas
Justo el Día de Inocentes, la Policía y un taxista fueron víctimas de una "supesta broma pesada" que por más de cuatro horas hizo movilizar a por lo menos mil agentes en Bogotá.
Todo comenzó en la noche del martes cuando la periodista Karen Gamba, quien labora en el Canal Capital de Bogotá, reportó, según se informó, que era víctima de un paseo millonario.
En diálogo con los medios, el comandante operativo número uno de la Policía de Bogotá, coronel Diego Hernández, reveló que estaba concretando una cita para la mañana de este miércoles con la periodista a través del chat del BlackBerry, cuando le indicó que llevaba más de media hora a la espera de un taxi.
"Me comentó que después de tomar el vehículo había unos tipos adelante... Se fue enredando (ella) con un poco de mentiras... que ya la llevaban para la casa, que tranquilo... luego me dijo que habían cambiado la ruta", comentó en La FM, el coronel Hernández.
Y apuntó: "me dice: 'necesitan mi teléfono'. Yo le dije borre el chat ...y me comentó: 'me lo quit'... empecé a escribirle, a llamarla y nada. Lo mismo hacían otros periodistas".
El coronel Hernández añadió que a través del chat él le pidió que le enviara las placas del taxi y ahí se inició la operación de búsqueda. Entre tanto, el taxista, José Castro, cumplía con su deber de llevar a la periodista hasta su vivienda, sin conocer cuál era la historia que lo llevaría a estar detenido por un par de horas.
Una pesadilla
La odisea comenzó pasadas las 11:15 de la noche. Tras dejar a la comunicadora, el conductor del carro de servicio público hizo otra carrera y luego fue informado por la empresa que debía reportarse al CAI de Santa Isabel, cercano al sector en el que se encontraba, porque había sido reportado como autor de un paseo millonario.
Allí, Castro comentó que él no había cometido ningún hecho ilícito y que había dejado a la mujer en la dirección que ella le solicitó. Sin embargo, quedó a disposición de las autoridades mientras se esclarecían los confusos hechos.
Narró a los periodistas, que fue movilizado en varias patrullas por el sector donde él la había dejado haciendo parte de la búsqueda de la supuesta mujer víctima de los ladrones.
Solo hasta las 2:30 de la mañana las autoridades lograron ubicar la dirección exacta de la vivienda de la periodista y allí se logró aclarar todo lo que resultó ser una pesada broma. Sin embargo, horas más tarde, la periodista Karen Gamba insistió que ella nunca sostuvo que era víctima de un paseo millonario, simplemente se encontraba nerviosa porque la placa y la tarjeta interna del carro no correspondía.
"...La mamá la levanta, después dijo que el celular se había quedado sin batería lo que es falso porque los pines entraban y las llamadas repicaban", comentó el comandante operativo número uno de la Policía de Bogotá. Al respecto, Karen Gamba señaló que había llegado muy cansada tras una larga jornada laboral (se levanta a las 3:30 de la mañana para estar en el Canal Capital a las 6:00 a.m.) y se quedó dormida. Por ello, no vio los mensajes, ni llamadas. Gamba agregó que al no responder su celular, el coronel Hernández llamó al Canal para alertar a sus compañeros y se comenzó a compartir una cadena virtual por los pines alertando por ella.
El coronel agradeció que en realidad no hubiera ocurrido algo más grave sobre todo porque él supuesto delincuente era buscado no solo por las autoridades sino que contaban con la colaboración de todos los taxistas. "Un hombre cumpliendo sagradamente su trabajo y lo íbamos a meter en problemas", enfatizó.
"Se logró ubicar al taxista y a la periodista, es un hecho repudiable, donde se roba la atención de toda la Policía Nacional", comentó sobre la situación el comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, general Luis Eduardo Martínez, en diálogo con La W.
Además el taxista reveló, en declaraciones a los medios, que la situación lo dejó estresado y lo afectado en su labor. "Quiero solucionar con ella de la mejor manera y ella tiene -como sea- dar la cara por la televisión y por la radio y hablar conmigo sobre el problema en el que me metió".
