Contrario a lo que podrían creer, los colombianos están tomando conciencia, cada vez más, de la importancia de no mezclar gasolina con alcohol.
Así pudimos constatarlo, no solo por cuenta de los comentarios que circularon en las redes sociales tras la aprobación del proyecto de ley que busca endurecer las sanciones en contra de los conductores que manejan ebrios; sino también con un sondeo realizado entre nuestras audiencias.
La mayoría de las personas que participaron está de acuerdo con que las leyes sean más duras. Al momento de hacer este conteo, el 70.3 por ciento de los participantes afirmaban que estaban de acuerdo con la iniciativa.
No obstante, también consideran que lo estipulado en el proyecto de ley no es una solución definitiva para esta problemática. El 28.9 por ciento de los consultados afirma que a pesar de que los conductores van a evitar conducir borrachos, la medida será temporal. Las personas dicen no estar seguras de si esta medida pueda modificar la situación.
“Todo seguirá igual, sino les importa quitarle la vida a los peatones, mucho menos les importarán las sanciones tontas”, afirmó @Ellignorante desde su cuenta de Twitter.
Otra inquietud de la ciudadanía es por la aplicación de la norma en todas las clases sociales; pues, por cuenta de los recientes escándalos de políticos ebrios (caso concejal de Chía y Merlano), muchos no confían en la igualdad a la hora de ejercer justicia.
José Alejandro Tangarife, por ejemplo, expresó a través de Facebook: "La ley debe de ser para todos... No sólo para el de ruana. Que cuando encuentren a un rico o a un político borracho también se le aplique".
Por otro lado, hay quienes piensan que estas sanciones aún no son lo suficientemente fuertes, como es el caso de @Gdelosríos que expresó: "Mediocre, realmente pensé que iban a ser sanciones más severas".
Así mismo, pese a la cantidad de accidentes que se han presentado en las vías este año, son pocos quienes aceptan que han conducido en estado de embriaguez: el 70, 3 por ciento de la gente dice no haber conducido nunca en estas condiciones y apenas el 21,6 por ciento acepta que ha manejado borracho, pero pocas veces.
Al preguntarle a las personas sobre historias de conductores ebrios que hayan ocasionado accidentes, se encontraron respuestas como: “Sí, yo mismo pude haber muerto con pasajeros incluidos”.
También contaron historias fatales como: "Mi mejor amiga falleció de copilota; el piloto iba ebrio. He conducido con licor (2,3 cervezas, pero no borracho). Deberían tolerar lo mínimo que son 2 cervezas". Igualmente se hallaron denuncias como: “Un conocido (amigo de un amigo) se emborrachó y mató a un trabajador. Pagó bajo cuerda unos $300 millones para que le dieran la casa por cárcel”.
La principal pena que se propone como castigo para los conductores que sean descubiertos borrachos es la cárcel con un 63,9 por ciento. A este castigo le sigue prestar un servicio social, con un 19,4 por ciento. Uno de los lectores dio otra recomendación en este sentido: “Resocializar es el mejor método de pedagogía”.
El sondeo hasta el momento ha sido respondido 38 veces, pero continúa abierto para que más lectores puedan participar.