Si este fue el anticipo, cómo será mañana cuando se inicie en firme la alta montaña del Giro de Italia, en el que José Serpa está octavo y Alberto Contador se mantiene en condición de líder.
El lance de ayer, conducido por el francés Christophe Le Mevel (Garmin-Cervelo) -estaba tercero a 1.19-, no hizo sino confirmar que las ambiciones están abiertas y que todos los pretendientes andan sobre el filo de la navaja cuando se avecinan etapas en extremo complicadas, al punto que determinen que este es el Giro más montañoso de los últimos años.
De razón, ante el ataque de Le Mevel (Garmin) del que hizo parte el acucioso antioqueño Carlos Alberto Betancur (Acqua & Sapone), que el cuadro Androni de los José, Serpa y Rujano, siempre estuviera pendiente de una fuga que le dio al francés el liderato parcial de la competencia, según apunta www.gazzettadellosport.com
Mientras en la carretera crecían las ambiciones, miles de personas se congregaron ante la iglesia de San Pedro, en el centro de Gante (Bélgica), para estar en el funeral del ciclista belga Wouter Weylandt, fallecido el 9 de mayo por una caída en Mezzanego (Italia), mientras corría la tercera etapa del Giro, anota la agencia Efe.
De vuelta a Italia, la contienda de 142 kilómetros, entre Tortoreto y Castelfidardo, que finalmente ganó el también francés John Gadret (AG2R), con el cuarto puesto de Serpa, mostró que los enemigos del líder Contador están listos para atacarlo de lejos, dejarlo solo cuando la escalada se complique, mientras hoy se corre una etapa llana, sobre 184 kilómetros.
El tríptico de este fin de semana será de miedo, con jornadas consecutivas de alta montaña en carreteras tanas y austriacas, con la disputa de un premio de fuera de categoría (el Giau), siete de primera, cuatro de segunda y dos de tercera, para saber de qué serán capaces Alberto Contador (Saxo Bank) y el resto de "hombres araña", sobre todo Serpa y Rujano.
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