Sotheby's logró recaudar diez millones de euros en la una subasta de arte precolombino que el gobierno mexicano había intentado paralizar por sospechar del origen ilícito de las piezas.
El resultado fue menor al previsto, pero en la última sesión llevadas a cabo este sábado en París, según señaló la casa, se ha batido un récord mundial para una venta de arte de ese periodo.
El presidente-director general de Sotheby's en Francia, Guillaume Cerutti, señaló en una declaración escrita que pese a ser inferior a las estimaciones, este resultado es muy positivo en el contexto particular que ha rodeado a la venta, y hace justicia a la extraordinaria calidad de la colección.
La sesión consiguió batir cuatro récords mundiales, entre ellas por la venta de una Venus "Callipyge" del año 400 a.C. del estado mexicano de Guanajuato, que fue entregada por 2 millones de euros, un precio nunca alcanzado por una cerámica mexicana.
Una estatuilla antropomorfa de la cultura olmeca, de entre el 900 y el 600 a.C, se vendió también por 481.500 euros, batiendo así el récord para una pieza olmeca en piedra, mientras que una cerámica brasileña dedicada a la inhumación, datada de entre el 400 y el 1350 d.C, se colocó por 325.500 euros, el mayor para una cerámica sudamericana.
De los 313 lotes que se van a subastar hasta mañana, 69 de ellos proceden de Perú, país que también había intentado suspender esa venta con una queja formal a la casa de subastas y a las autoridades francesas.
A esa queja se ha sumado la del Grupo de Estados Miembros de América Latina y el Caribe (GRULAC) en la Unesco, que esta semana requirió a ese organismo que condenara públicamente el tráfico ilícito de bienes culturales, así como la mercantilización del patrimonio arqueológico que lo propicia.
Sotheby's hizo saber que a lo largo de los últimos meses ha investigado la procedencia de esas piezas, y subrayó que tenía plena confianza en que las obras podían ponerse a la venta, motivo por el que no cambió su agenda.