Doscientos socorristas inspeccionan todavía los vecindarios de Moore, un suburbio de Oklahoma City, atentos a cualquier voz que pueda salir de entre los escombros después del gigantesco tornado que el lunes en la noche aplastó casas, demolió dos escuelas primarias y dejaba, al cierre de esta edición, 24 muertos incluidos nueve niños.
La tormenta será recordada como una de las más destructivas en la historia de Estados Unidos: el tornado fue de la clasificación EF-5, la mayor en la escala de medición, con vientos de al menos 320 kilómetros por hora.
El meteoro, que recorrió 27 kilómetros y tenía un ancho de dos kilómetros, fue de tal magnitud que Keli Pirtle, del servicio meteorológico de E.U., utilizó la palabra "increíble" para describir su poderío.
El presidente Barack Obama se comprometió a proporcionar ayuda del gobierno federal a Oklahoma y lamentó lo sucedido: "En un instante barrios quedaron destruidos, decenas de personas perdieron la vida y muchas más resultaron heridas. Entre las víctimas hubo niños que intentaron refugiarse en el lugar más seguro que conocían: la escuela".
Trabajadores de emergencias rescataron más de 101 sobrevivientes de entre los escombros de hogares, escuelas y un hospital, y alrededor de 237 personas resultaron heridas. Sin embargo, la gobernadora de Oklahoma, Mary Fallin, dijo que la cifra podía aumentar.
Superó bomba de Hiroshima
La humedad, la fuerza del viento y la lluvia se combinaron con toda precisión para generar el enorme tornado que devastó Moore, Oklahoma. Y esa combinación liberó una asombrosa cantidad de energía que, según meteorólogos consultados por AP, opacó el poder de la bomba atómica que arrasó con Hiroshima.
Los expertos usaron mediciones en tiempo real para calcular la energía liberada durante el tiempo que duró el fenómeno. Esos cálculos oscilaron entre 8 veces y más de 600 veces la fuerza de la bomba de Hiroshima, y la mayoría de los expertos se inclinaron por darle el valor máximo.
"Un tiempo de 40 minutos es mucho tiempo en el caso de un tornado normal, pero no demasiado inusual para uno tan violento", explicó el meteorólogo investigador Harold Brooks, del Laboratorio Nacional de Tormentas Severas en Norman, Oklahoma. "Menos del 1 por ciento de todos los tornados en Estados Unidos tienen tal nivel de fuerza, y ocurren sólo 10 veces al año", agregó.
Dado que esta es la tercera tormenta de gran intensidad que afecta a Moore en 14 años, algunas personas se preguntan por qué: es una combinación de factores geográficos, meteorológicos y mucha mala suerte, dijeron los expertos.
Los científicos conocen los ingredientes necesarios para la formación de un tornado devastador, pero no entienden las razones por las que en algunas ocasiones llegan a ser grandes tormentas y en otras no. Y todavía tratan de determinar qué efectos, si acaso hay alguno, pudiera tener el calentamiento global sobre los tornados.
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6
