Es un holandés que casi nadie conocía y a donde quiera que va causa admiración.
Mucha gente, en las salidas y llegadas del Clásico RCN quiso subirse a él, pero todo se hizo por medio de invitación, ya que por esos días de competencia sirvió de albergue a los corredores de Movistar.
Ellos se sienten privilegiados de contar con un apoyo tan novedoso y cómodo como es este bus que valió 400.000 euros y que posee toda clase de comodidades para los ciclistas y los miembros del cuadro profesional continental que compiten en diferentes pruebas de América.
El bus es un DVL holandés, modelo 2008, dotado con carrocería irizar, que posee toda la dotación de un carro casa, que incluso acoge otros elementos para darle total comodidad al elenco de ciclistas y auxiliares.
Este vehículo comenzó a ser usado por el Movistar Team Continental en la Clásica de Santander y permanecerá en Colombia, antes de ser llevado a la Vuelta a Chile y la Vuelta al Táchira, a comienzos del año venidero.
En la Madre Patria el bus fue manejado durante cuatro años por Iñaki Aranguren, quien en Colombia le entregó el timón a William Romero, que hizo el curso al lado de su colega, para conocer "los gallos del vehículo".
Para los pedalistas, este detalle del equipo va más allá de la cotidianidad de la competición y la felicidad se expresa en reacciones como la del venezolano José Alarcón, quien dijo emocionado: "Qué regalo nos hicieron; esto es un privilegio". Este integrante del elenco pudo disfrutarlo durante el pasado Clásico RCN-Comcel.
La gente, cuenta Lina María Lopera, jefe de prensa del equipo, cree que el bus sólo tiene asientos en su interior. Como algo curioso, los mecánicos de los demás cuadros del ciclismo nacional hicieron fila para conocerlo desde cuando fue puesto en marcha con motivo de la Clásica de Santander.
"Cuando llegamos al aeropuerto de Bucaramanga, el bus nos esperó a la salida del terminal. Todos nos quedamos boquiabiertos con esa belleza. Después, al final de las etapas y en los transbordos comprobamos las bondades, porque tras los tramos complicados y duros se logra mucho descanso. Todos los corredores de Movistar estamos dichosos", anotó el ciclista antioqueño Nicolás Castro, que pronto viajará a la Vuelta a Guatemala.
Este es un paso más hacia la modernidad del ciclismo colombiano que en América marca la pauta y que se convierte en elemento clave para brindarles mayor privacidad y comodidad a los ciclistas, gracias a este holandés que era prácticamente desconocido, pero que donde va causa admiración.
La frase
"Antes y después de la competencia se siente mucho alivio cuando uno llega a las sillas del bus. Esta clase de vehículos la conocíamos por fotos del Tour o la Vuelta a España."
Nicolás Castro
Pedalista antioqueño del Movistar
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6
