Para poner su granito de arena, no necesita tener una cuenta bancaria a reventar... Lo único que necesita es tener alguna habilidad, un par de horas disponibles a la semana y por supuesto, muchas ganas de ayudar.
Así funciona la Acción Voluntaria, definida en la legislación colombiana como "el conjunto de acciones de interés general desarrolladas por personas naturales o jurídicas, quienes ejercen su acción de servicio a la comunidad en virtud de una relación de carácter civil y voluntario". En otras palabras, hacer parte de un voluntariado significa donar su tiempo para alguna actividad de interés social o comunitario.
Un estudio del Instituto Rosarista de Acción Social (Seres) de la Universidad del Rosario, en asocio con el Departamento Administrativo Nacional de la Economía Solidaria (Dansocial), reveló que el voluntariado no solo tiene un impacto social importante, sino que impulsa el crecimiento económico:
Un incremento del 1,0 por ciento en el número de personas dedicadas a esta labor, permite que el PIB departamental crezca el 0,021 por ciento. De igual forma, si aumenta en 1,0 por ciento el número de instituciones de voluntariado, el PIB regional lo hace en 0,5 por ciento.
El informe señala que Medellín es la segunda ciudad con mayor número de voluntarios: el 18 por ciento de las personas en edad de trabajar realizan labores de voluntariado, mientras que en Bogotá el aporte es del 38 por ciento y en Cali, el 15 por ciento.
Dividendo por Colombia es una organización que lleva el voluntariado al nivel empresarial. Trabaja con 123 compañías y sus empleados apoyan diferentes proyectos educativos donando su tiempo.
Durante 2010, el voluntariado por horas o voluntariado corporativo de esa entidad movilizó a 4.226 personas en el país y realizó 279 actividades de su portafolio de servicios, que incluyen talleres de material didáctico, en las que los voluntarios se reúnen y con la ayuda de un tallerista, elaboran juegos y materiales para que los niños los usen en su proceso educativo; visitas de los niños a las empresas, con el objetivo de sensibilizarlos e incentivar su permanencia en el colegio y jornadas de reparación locativa, en las que grupos de 60 a 100 voluntarios son convocados para pintar una institución educativa.
Apoyo al emprendimiento
A través de Proantioquia, los altos directivos de empresas de la región también hacen su aporte ofreciendo su tiempo, conocimiento y experiencia a proyectos de emprendimiento que tienen el potencial de generar desarrollo para la ciudad, pero que necesitan un empujón para estructurar su modelo de negocio. Quién mejor que alguien como el presidente de Nutresa, el Director Administrativo de Distrihogar o el expresidente del Grupo Mundial, entre muchos otros.
Andrés Cano Posada, coordinador de Productividad y Competitividad de Proantioquia, explica que se trata de unir a un alto directivo con un emprendedor, que generalmente tiene un amplio conocimiento técnico pero le hacen falta conceptos de administración y de mercadeo y una visión internacional de su negocio. "El empresario voluntario le aporta su tiempo y su conocimiento, pero también sus contactos empresariales y le permite acercarse a fondos de capital y redes de inversionistas ángeles", señala Cano.
Aquí les mostramos dos historias de de empresas jóvenes que hoy se están viendo beneficiadas del programa de Voluntariado Empresarial para el Emprendimiento, de Proantioquia.
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